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Aunque con matices por parte del PP, todos los partidos vascos avalan el fin de la dispersión de los presos de ETA cinco años después de la disolución de la banda armada. Las formaciones políticas valoran «un paso más hacia la consolidación de la convivencia» ... en Euskadi, pero creen que ahora debe ser la izquierda abertzale quien mueva ficha. «Corresponde a los presos y a su entorno social y político reconocer el daño injusto causado por la violencia, ante las víctimas y ante la sociedad», ha apelado este sábado el presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar.
Sabin Etxea ya lanzó el mismo viernes, cuando Instituciones Penitenciarias oficializó el acercamiento de los últimos cinco presos de ETA que se encontraban en cárceles del resto de España, un comunicado en el que acogía la decisión «con satisfacción y optimismo». En la misma línea, Ortuzar ha mostrado su postura favorable ayer antes de participar en un acto del partido en Nanclares de Oca. «Es un paso más importante hacia la convivencia en nuestro país. Poco a poco vamos cerrando ese negro pasado que abrió la violencia y el terrorismo en nuestro país», ha asegurado.
El PSE-EE ha cerrado filas con el Gobierno de Pedro Sánchez, que ha acelerado el fin de la dispersión desde su llegada a La Moncloa en 2018. Aunque Eneko Andueza ha eludido hacer ninguna referencia al respecto en el acto del 125 aniversario de la agrupación de Eibar, el parlamentario Ekain Rico sí ha defendido en Radio Euskadi los acercamientos en el contexto de una política penitenciaria «inteligente y legal». Pero ha acusado a la izquierda abertzale de «seguir alejada de la realidad de una Euskadi plural» y de llevar la mochila que supone haber prometido «un paraíso al que se llegaba a través del asesinato y la extorsión».
«Primera parte de la factura a Otegi»
Alusiones a las que también se ha sumado Elkarrekin Podemos-IU. El parlamentario David Soto dice congratularse de que se den pasos por «la convivencia y la normalización política» en Euskadi, pero apela a la izquierda abertzale para que «continúe dando pasos en lo que respecta a la condena de lo que fue la violencia de ETA». El dirigente morado señala, en todo caso, que el fin de la dispersión debería haber llegado antes porque «desde hace tiempo» existía un marco jurídico que propiciaba que no se diese «una orientación vengativa» en la política penitenciaria.
Quien más matices añade a los acercamientos es el PP. «Nos guste más o menos, máximo respeto a la ley. Si acorde a la legalidad están aquí, será acorde a la legalidad», ha antepuesto la presidenta del partido en Gipuzkoa, Muriel Larrea. Eso sí, los populares reivindican la necesidad de la memoria para que se sepa «por qué unos pocos en nombre de todo el pueblo se dedicaron a asesinar y matar al discrepante». El presidente de la formación, Carlos Iturgaiz, critica además que Sánchez haya «pagado la primera parte de la factura a Otegi» con el fin de la dispersión. La segunda, dice, es «ir sacando a la calle a los etarras».
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