La regionalista Cristina Ibarrola, el día que tomó posesión como alcaldesa de Pamplona. EFE

Pamplona, el trofeo que Bildu quiere lograr tras la investidura

Los socialistas han redoblado las críticas contra la alcaldesa de UPN, Cristina Ibarrola, que lleva sólo cuatro meses en el poder

Sábado, 21 de octubre 2023, 22:56

Cuatro meses después de que se constituyesen los ayuntamientos, el de Pamplona se mueve sobre arenas movedizas. La socialista María Chivite, presidenta de Navarra, ya ha mostrado su hartazgo por la actitud de la alcaldesa, Cristina Ibarrola, de UPN. Lo que podría ser el habitual ... rifirrafe entre dos administraciones lideradas por partidos diferentes esconde mucho más. Sólo unos días después, el PSN daba a EH Bildu la presidencia de la Federación Navarra de Municipios. Y eso ha abierto un hipotético escenario que podría generar un terremoto político que se sentiría en toda España: que la coalición soberanista y los socialistas pongan en marcha una moción de censura que diese el Ayuntamiento al candidato abertzale y exalcalde de la ciudad, Joseba Asiron.

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A día de hoy, los de Chivite recalcan que esa opción no está sobre la mesa. No ocultan su malestar con la regidora regionalista, a la que acusan de no contar para nada con la oposición, pero rechazan que se estén planteando aliarse con EH Bildu. Pero Arnaldo Otegi ha sido mucho más explícito. «Espero que con el tiempo seamos capaces de hacerlo, con serenidad, vamos a intentarlo».

Moción de censura

El PSN debería votar a favor del aspirante de Bildu, no bastaría con una simple abstención

Ibarrola se hizo con la makila tras unos resultados electorales que dejaron un mapa municipal muy fragmentado. Ganó UPN con nueve concejales, solo uno más que EH Bildu. El PSN sacó cinco, Geroa Bai y el PP empataron a dos y Contigo-Zurekin, la marca de Podemos, se quedó con uno. La dirigente regionalista logró su objetivo gracias al voto a favor de los populares y la abstención socialista. Pese a las presiones de EH Bildu para que respaldase a Asiron, el PSN evitó dar un paso que hubiese generado una enorme tormenta política.

Los de Chivite se mueven en un ambigüedad calculada con la izquierda abertzale, conscientes de que sigue siendo un tema sensible para parte de la militancia y otros barones regionales. Aceptan sus votos, o al menos su abstención, para presidir la comunidad foral, pero siguen sin dar el salto de facilitar la Alcaldía de Pamplona a EH Bildu. Al menos por ahora.

Complejos equilibrios

Para que saliese adelante la moción de censura tendría que haber mayoría absoluta. Es decir, no valdría con la abstención del PSN, tendría que votar a favor. Supondría todo un golpe de consecuencias imprevisibles que solo darían si contasen con el aval de Ferraz. Ahí entra en juego una persona clave en todos los movimientos que se realizan entre los socialistas y la izquierda abertzale. Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE que ocupó durante años el mismo puesto en el PSN y que mantiene un hilo abierto constante con EH Bildu, entre otros, con Adolfo Araiz, histórico miembro de la mesa nacional de HB y ahora diputado navarro.

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También hay que tener en cuenta el juego de alianzas que se está moviendo en la comunidad foral en los últimos meses. Detrás de la ruptura entre UPN y el PP, en parte, se esconde el interés de los regionalistas en abrir el abanico de pactos e intentar una aproximación a los socialistas para tratar de retener su cada vez más escaso poder municipal. Una ruta que por ahora se está demostrando intransitable, como se vio hace unos días cuando el PSN dio la presidencia de la Federación de Municipios Navarros a EH Bildu.

El acercamiento entre los socialistas y la izquierda abertzale siempre se mueve paso a paso, a base de gestos. Y este fue de calado porque los representantes del PSN votaron expresamente a favor de Xabier Alcuaz, alcalde de Tafalla. Será la primera vez que la coalición soberanista esté al frente de la asociación. En la formación regionalista están convencidos de que ese apoyo no será gratuito. Y temen que la siguiente pieza en caer sea Pamplona.

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