Inés Sabanés (Cubells, Cataluña, 1953) volvió al Congreso de los Diputados en 2019 de la mano del grupo Más País- Verdes Equo. Ahora, el partido liderado por Iñigo Errejón busca expandir sus siglas por todo el país. En paralelo, el reto de los ecologistas es ... armar un espacio político verde al estilo de otros países europeos, en el que la emergencia climática sea una prioridad. Un espacio que, a juicio de su coportavoz federal, sólo puede situarse en la izquierda.
- ¿Más País tiene futuro en Euskadi?
- El espacio político que representa Más País tiene futuro en Euskadi, en España y en Europa porque es diferente a los clásicos espacios políticos. Queremos, desde Verdes Equo, una cooperativa política con quien comparta poner en el centro de la política la transición ecológica y la lucha contra el cambio climático. Ese es nuestro vínculo con Más País en el Congreso de los Diputados, que está dando muy buen resultado.
- ¿De qué manera se podría dar ese salto a Euskadi? En las elecciones de 2019 sólo se presentaron por Bizkaia y apenas sacaron 8.500 votos…
- El espacio verde tiene mayores dificultades en el sur de Europa, pero confiamos en que la emergencia climática, la mayor concienciación de la gente joven y nuestro vínculo con el partido verde europeo sean suficientes para la construcción de ese espacio, en cooperativa política con Más País. Si hay un momento en el que es preciso configurar un espacio político verde es ahora donde la lucha contra el cambio climático está en el centro del debate. Durante mucho tiempo no fue así.
- La ruptura con Podemos hizo que en las elecciones autonómicas en Euskadi de 2020 Equo se quedara fuera del Parlamento vasco.
- La decisión partió en primer lugar de Podemos, que fue la que excluyó a la coalición. A partir de ahí, seguimos creyendo en que hay una oportunidad de construcción de un espacio más enfocado a las políticas verdes de sostenibilidad y transición con justicia social. Lo estamos construyendo ahora con más calma de lo que supuso en aquel momento, pero no podemos olvidar que estamos en un momento de reconfiguración de los espacios políticos.
- O sea, que el eje es lo verde y no la izquierda.
- Diferenciar las políticas verdes de primar o atender la justicia social es un error. Va absolutamente vinculado.
- ¿Y ese espacio verde es excluyente con la derecha?
- ¿Me pregunta si pactaríamos con la derecha?
- Sí.
- No, no lo haríamos. Es un espacio de progreso que no tiene nada que ver en nuestro país con las políticas del PP o con los negacionistas de Vox. Las políticas verdes tienen un vínculo muy grande con la justicia social, los derechos humanos y la sostenibilidad. No es un espacio de negacionismo ni de involución, que es lo que plantea la derecha.
- ¿Cómo van las negociaciones con la vicepresidenta Yolanda Díaz para formar un espacio político a la izquierda del PSOE?
- De momento no estamos en esas negociaciones, si es que las hay. Pero insisto en que la reconfiguración de los espacios políticos está cambiando. Creemos más en modelos de cooperativa que de concentración. Esto de agrupar a la izquierda del PSOE es una teorización del siglo XX que llevamos mucho tiempo escuchando. Quizá ha llegado el momento de cambiar la ley electoral, buscar un mayor pluralismo y reconfigurar espacios hacia modelos más europeos, como los verdes y las izquierdas, que se entienden pero no ocupan un mismo espacio.
- ¿Y ese modelo cooperativo estaría abierto en un futuro a colaborar con Podemos?
- Creo que este país necesita unos cambios en profundidad política que no pasan por los elementos tácticos de suma y agrupaciones. ¿Ponerse de acuerdo en las causas políticas? Claro. Con Podemos, con el PSOE y con quien haga falta. Si de lo que se trata es de pelear por mejorar la vida de la gente, las pensiones, el salario mínimo, los derechos humanos… Por supuesto. De momento, creo que hay que fijarse en la posible cooperación o colaboración política, y nosotros estamos construyendo un espacio.
- ¿Es más fácil entenderse con Yolanda Díaz que con Pablo Iglesias?
- Yo represento a Verdes Equo y eso es una política de Más País, pero yo creo que toda la evolución de lo que ha supuesto Más Madrid, primero, y Más País, después, es que es un deseo de confluencias ciudadanas. No conozco en profundidad qué provocó el desentendimiento entre los distintos liderazgos. Creo que entre las izquierdas nosotros hemos hecho un ejercicio de responsabilidad y a la vez, estamos construyendo un espacio político vinculado con la transición ecológica. Podemos debería reflexionar sobre sus resultados electorales y hacer su propia oferta.
- ¿Qué le hace pensar que en el futuro el tema medioambiental vaya a ser un factor decisivo del voto?
- El medio ambiente y la crisis climática van creciendo como una preocupación de la gente. Creo que ocupa una centralidad política. Luego los electores decidirán.
Subida histórica de la luz
- Finalmente habrá comisión en el Congreso para investigar la subida de la tarifa eléctrica.
- Sí. Creo que es muy importante que haya una comisión en la que podamos ver los elementos que están tensionando la factura y las medidas que tenemos que aplicar, tanto el fondo de sostenibilidad como la ley que tiene que regular la eliminación de los beneficios caídos del cielo.
- ¿Usted también cree que a las grandes compañías les ha faltado empatía?
- Lo que les ha sobrado es beneficios. Y, desde luego, prácticas irregulares, cuando menos la del desembalsamiento. Si no se tocan los grandes beneficios no podemos resolver la situación. No se trata de empatía, se trata de justicia.