Urgente Grandes retenciones en la A-8, el Txorierri y la Avanzada por la avería de un camión
Alfredo De Miguel, exnúmero dos del PNV alavés, minutos antes de ingresar en la prisión de Zaballa el pasado 6 de julio. Jesús Andrade

De Miguel, el respetado bibliotecario de la cárcel de Zaballa

El jefe de la mayor trama corrupta de Euskadi lleva «la voz cantante» en el módulo 4. Coordina en la cárcel el voto por correo y ha completado el mismo curso que Urdangarin

David González

Domingo, 5 de mayo 2024, 01:04

Cada mañana, de lunes a viernes, de nueve de la mañana a doce del mediodía, ayuda a ordenar libros, registra devoluciones o entrega a sus compañeros aficionados a la lectura los volúmenes solicitados. Alfredo de Miguel es el nuevo auxiliar de la biblioteca del centro ... penitenciario de Álava. El que fuera 'número dos' del PNV alavés, el cabecilla de la mayor trama de corrupción política en Euskadi detectada por la Justicia, cumple mañana diez meses en Zaballa, la moderna cárcel a 15 kilómetros de Vitoria donde se ha hecho respetar por funcionarios y compañeros dado su «buen carácter y cabeza». Aunque tampoco faltan recelos por lo que entre la población reclusa se entiende «como un especial trato» para el interno De Miguel.

Publicidad

Intramuros le llaman 'Txitxo', como en sus tiempos de gloria en la Diputación alavesa cuando dirigía el determinante departamento de Administración Local y estaba llamado a reinar en la provincia. Ahora es el enlace penitenciario para garantizar el derecho a voto de los reclusos. En las elecciones vascas, 84 reos entregaron su sobre a una empleada de Correos con De Miguel como testigo directo. En las europeas repetirá cometido.

Disfruta de una celda de 13 metros cuadrados para él solo en el pabellón 4, donde se ha erigido en uno de los internos que llevan «la voz cantante», según ha sabido este periódico de fuentes penitenciarias. Se trata de un módulo de respeto con 72 habitaciones dobles en el que sus 80-90 reclusos (el número fluctúa) se «autogestionan» el día a día.

Los datos

De 13 metros cuadrados

Disfruta de una celda para él solo. La mayoría de reos también, pero «no desde el primer mes como él»

Elecciones vascas

Ayudó a la empleada de Correos desplazada a la prisión alavesa para coger los votos de los internos

Tiene una condena de 9 años

Entre octubre y marzo asistió a un programa específico para delitos económicos

En ese clima, «el más listo suele ser el rey», aclaran los medios consultados. Aparte de sus cómplices -Koldo Ochandiano, Xabier Sánchez Robles y Aitor Tellería- comparte techo con ladrones, traficantes, violadores y asesinos, entre los que se encuentran algunos etarras.

Publicidad

Suele vestir pulcro, sencillo: zapatillas, vaqueros, polo, una cazadora azul... tal y como ingresó el pasado 6 de julio, tras agotar todos los recursos legales posibles, incluida una petición de indulto sin resolver. En diciembre de 2019, la Audiencia Provincial de Álava condenó a De Miguel y a catorce compinches -de 26 imputados- por cargos como asociación ilícita, tráfico de influencias, malversación de fondos públicos o cohecho. La batalla legal se estiró hasta el Tribunal Supremo, que en enero de 2023 ratificó la gravedad de sus actos amparados en sus privilegiadas posiciones políticas. La contundencia de la sentencia obligó al PNV a pedir disculpas de manera pública.

Compañeros etarras

Castigado con una pena efectiva de 9 años, el exdiputado foral disfruta de una celda para él solo casi desde que puso un pie en Zaballa, «al mes» de llegar, lo que no ha gustado en un sector de la población reclusa. Desde el Departamento vasco de Justicia aclaran que «es un derecho recogido en la Ley Orgánica General penitenciaria» y que «afortunadamente la mayor parte» de los condenados descansa sin compañía. A 31 de marzo, el penal alavés alojaba a 869 reclusos para 720 habitaciones. Contabilizando los centros de Basauri y Martutene, la población reclusa en el País Vasco asciende en la actualidad a 1.608 personas. De ellas, catorce superan los 70 años.

Publicidad

De Miguel no trabaja solo en la biblioteca. Tiene cinco compañeros, varios etarras, que desempeñan labores similares, todas ellas remuneradas. «Son actividades previstas en los programas individualizados de tratamiento diseñados por la Junta de tratamiento del centro», puntualizan desde el Gobierno vasco.

Además, entre el 10 de octubre y el 19 de marzo, De Miguel -junto con otros siete presos- completó el programa PIDECO, el curso específico para delincuentes económicos. Es el mismo programa realizado un par de años atrás por Iñaki Urdangarin. Aparte de para concienciar, ayuda a acelerar el acceso a beneficios penitenciarios. «No es la única ni la primera edición del programa», aclara Justicia. Sánchez Robles -exdirector de Juventud del Gobierno vasco - y Ochandiano -excontable del parque tecnológico de Miñano- lo están realizando ahora.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad