Iturgaiz censura la «política del desorden» de Urkullu con las restricciones para Semana Santa

Xabier Garmendia

Sábado, 27 de marzo 2021, 13:22

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Tras una semana marcada por la confusión y los vaivenes en las restricciones contra el coronavirus de cara a la Semana Santa, Carlos Iturgaiz ha censurado este sábado la «política del desorden» del Gobierno de Iñigo Urkullu. El presidente del PP vasco ha constatado el «hartazgo» de la sociedad con los repentinos cambios en las medidas y ha apremiado al Ejecutivo autonómico a «ponerse las pilas» para acelerar la vacunación. En todo caso, pese a las duras críticas, ha vuelto a ofrecer al lehendakari su disposición a colaborar siempre que sea para «salvar vidas y crear empleos».

El líder de los populares vascos ha participado en un acto en Bilbao en el que se han entregado los carnés a miembros de Nuevas Generaciones recién afiliados. Durante su intervención, ha calificado de «desastrosa» la gestión de la pandemia por parte de la coalición PNV-PSE, especialmente por el lento ritmo de la campaña de vacunación. «El lema de este Gobierno es menos vacunas y más contagios», ha sintetizado. Se ha escudado para ello en el dato de que Euskadi es la comunidad autónoma donde más están creciendo los positivos y una de las últimas en el proceso de inmunización.

La formación conservadora lleva mostrándose muy crítica con la gestión de la crisis sanitaria desde hace meses, pero los acontecimientos de esta última semana han acabado por colmar su paciencia. En opinión de Iturgaiz, el salvoconducto que permitirá saltarse el confinamiento perimetral si se acredita una reserva turística con pernoctación es una muestra de «elitismo y clasismo». No entiende cómo, por ejemplo, se podrá esquivar un cierre local para ir a un hotel y no para acudir a una segunda residencia en ese mismo municipio. «¿Quién lo entiende? ¿Por qué unos sí y otros no?», se ha preguntado.

El presidente del PP vasco también ha cargado contra la proposición de ley antipandemia registrada el viernes por PNV y PSE en el Parlamento vasco. Ha criticado tanto las formas, en las que observa «filibusterismo político» por no presentarla como proyecto de ley del Gobierno, como el fondo. «Es la ley de la pataleta y de la venganza contra los jueces porque a Urkullu le salió mal la jugada para torturar a la hostelería», ha afirmado. La coalición PP+Cs va a estudiar el contenido de la propuesta para la futura norma, aunque el parlamentario Luis Gordillo ya amagó con recurrirla al Constitucional.

Ante esta situación, Iturgaiz ha vuelto a tender la mano al lehendakari para paliar las consecuencias sociales y económicas de la crisis sanitaria, y ha prometido hacer una oposición «constructiva» en la Cámara autonómica. El líder conservador ha defendido las siglas del PP como el «proyecto común de todos los constitucionalistas» en Euskadi y ha llamado a «ensancharlo», en una alusión implícita a los simpatizantes de Ciudadanos, partido con el que comparte alianza electoral y grupo parlamentario. «Tenemos los brazos abiertos», ha insistido a este respecto.

Aprovechando la presencia de miembros de Nuevas Generaciones, el líder del PP vasco les ha llamado a «romper las cadenas del nacionalismo obligatorio». En ese mismo punto ha abundado la presidenta del partido en Bizkaia, Raquel González, quien ha ironizado con que los jóvenes allí presentes estaban recogiendo el «carné equivocado» porque, ha venido a decir, solo el de EGI -la organización juvenil del PNV- asegura un trabajo. «Sois casi una especie en extinción porque tenéis criterio y personalidad. Les chirriáis al nacionalismo más rancio y a los 'progres' que se mueven en manada», ha añadido.

En el acto también ha tomado la palabra Bea Fanjul, diputada por Bizkaia y quien a partir del 18 de abril se convertirá en la presidenta nacional de Nuevas Generaciones. En su intervención, se ha congratulado de los «perfiles diferentes» que integran la organización juvenil, con unos 35.000 afiliados en toda España, y ha anunciado algunos cambios en la estructura interna. En clave eminentemente política, Fanjul ha reivindicado el PP como la «casa común de todos los españoles» y en la que, en un indisimulado guiño a Ciudadanos, «acabarán todos los partidos».