El enigma del cooperante que 'se saltó' el control policial y murió apuñalado

Las autoridades han aclarado que este joven, de nombre Pablo, vivía en Vilafranca del Penedés (su padre es de Cáceres y su madre de Burgos, pero él nació en Cataluña), trabajaba en Barcelona y había estado de cooperante en varios países, entre ellos Haití. Sobre su fallecimiento han explicado que no murió a causa de los disparos de la Policía, como inicialmente se dijo, sino que presentaba una herida, posiblemente, por arma blanca que la autopsia ha demostrado que fue el origen del fallecimiento. Esta herida se la habría causado el terrorista, que sigue todavía en paradero desconocido.

La investigación sigue esta línea en vista de las pruebas, y es que cuando se localizó el coche, un Ford Focus, el joven no apareció en el asiento del piloto. De lo que se deduce que habría habido una segunda persona al volante y que ésta y no el cooperante habría sido la que se saltó el control de los Mossos d'Esquadra, arrollando a una de las agentes y provocándole una rotura de fémur.

Apenas dos horas y media después de producirse el masivo y mortal arrollamiento en las Ramblas un control de los Mossos en la Diagonal trató de dar el alto a un vehículo, que haciendo caso omiso a las indicaciones de detenerse atropelló a su paso a una sargento. Otro agente repelió entonces el ataque con disparos mientras el conductor se daba a la fuga.

El coche fue encontrado a tres kilómetros del control policial, en la zona de Sant Just Desvern. Cuando llegó la Policía encontró en el interior del vehículo el cadáver de un español sin antecedentes que no tenía heridas de bala, sino que presentaba una herida mortal por arma blanca.

Circunstancia que abrió una incógnita: ¿quién conducía la furgoneta y quién le apuñaló? Según los investigadores, el presunto autor del atentado yihadista de Las Ramblas podría ser quien robó este coche y en su huida se saltó el control policial de la Diagonal y mató con un arma blanca a su conductor.