Ibone Bengoetxea, el inesperado ascenso de la eterna promesa vizcaína

Psicóloga de formación, Ibone Bengoetxea comenzó su carrera política en 2003 en el Ayuntamiento de Bilbao, institución en la que hasta 2015 fue concejala de Circulación y Transportes; Cultura y Educación, y presidió instituciones como el Teatro Arriaga y Bilbao Musika. A las elecciones de 2011 ya se presentó como número dos de la candidatura de Iñaki Azkuna, del que se convirtió en una de sus principales colaboradoras, junto al ahora director de EiTB, Andoni Aldekoa. Tras la muerte del 'mejor alcalde del mundo' en 2014 fue incluso señalada por el regidor interino de Bilbao, Ibon Areso, como la persona idónea para dirigir el Ayuntamiento. En esos momentos Bengoetxea presidía también la asociación de municipios vascos Eudel (lo hizo entre 2011 y 2015).

Sin embargo, el PNV optó finalmente por Juan María Aburto como su candidato municipal en Bilbao y situó a Ibone Bengoetxea en el primer gabinete del entonces recién nombrado diputado general de Bizkaia Unai Rementeria, donde durante seis años (2015-2021) se hizo cargo de la cartera de Administración Pública y Relaciones Institucionales. Durante ese período fue compañero de Gabinete del ahora lehendakari Imanol Pradales, con el que mantenía una excelente relación.

Su cese como diputada foral en marzo de 2021, en plena pandemia, es uno de los grandes misterios de la política vizcaína en los últimos tiempos. Unai Rementeria hizo una minicrisis, cesó a dos diputadas forales –Ibone Bengoetxea y Elena Unzueta– y colocó en su gobierno a Amaia Antxustegi y Elixabete Etxanobe. Dos años después, ésta última acabaría siendo su sucesora y se destaparía que en aquel movimiento la dirección del PNV vizcaíno ya empezaba a jugar sus cartas para sustituir a un Rementeria con el que mantenía discrepancias.

No hubo entonces explicaciones sobre la abrupta salida de Ibone Bengoetxea del gobierno foral. Se rumoreó que necesitaba más tiempo para pasarlo con su familia, un 'sambenito' que le ha acompañado desde que cotizaba como sucesora de Azkuna en los años 2014 y 2015. Sin embargo, con el tiempo cobró más fuerza la hipótesis de que su destitución había sido una decisión personal del diputado general, con el que al parecer había mantenido discrepancias en la gestión de algunos asuntos de su departamento. «Ibone es muy competente y firme en su forma de gestionar», aseguran quienes le conocieron de cerca en aquella época en la Diputación de Bizkaia.

Tras la ruptura y de forma inmediata, el director general de EiTB, Andoni Aldekoa, su amigo desde los tiempos en que trabajaron juntos en el Ayuntamiento de Bilbao en el equipo de Azkuna, la acogió en el seno de su equipo en la corporación pública, en donde ha trabajado durante los últimos tres años en calidad de gerente de la televisión vasca. Ahora, rescatada de forma inesperada para la política por Imanol Pradales, se le presenta el reto de confirmar como vicelehendakari primera del Gobierno vasco las grandes expectativas que su figura política despierta desde hace más de una década en Bizkaia.