Homenaje al ertzaina asesinado que evitó una masacre en el Guggenheim

Efectivo de la Ertzaintza y de la Policía Municipal de Bilbao homenajearon en la noche de ayer sábado al agente autonómico Txema Aguirre Larraona, en el 27 aniversario de su asesinato a manos de ETA. El ertzaina fue tiroteado junto al Guggenheim, en una plaza que lleva hoy su nombre. Este domingo, a mediodía, hay prevista también una concentración y una ofrenda floral. Aguirre tenía 35 años cuando sus asesinos le quitaron la vida. Dejó un niño de 9 años.

El atentado tuvo lugar el 13 de octubre de 1997, cinco días antes de que se inaugurara el centro cultural. En aquel momento se trabajaba en la puesta de largo del museo. A 'Puppy' le estaban poniendo todavía las flores. Los terroristas se presentaron en el lugar con una furgoneta, ataviados como operarios que venían a dar los últimos retoques.

En el compartimento trasero llevaban varias jardineras, cargadas con granadas y minas antipersona. El objetivo era provocar una matanza el día de la inauguración, al paso de las autoridades. En el acto iban a estar el Rey Juan Carlos; el lehendakari, José Antonio Ardanza; o el por entonces alcalde de Bilbao, Josu Ortuondo. Txema Aguirre se percató de que algo extraño estaba sucediendo con esa furgoneta, que llevaba placas falsas. Se acercó a pedir la documentación y fue entonces cuando recibió varios disparos que acabaron con su vida.

Aquel comando estaba liderado por Eneko Gogeaskoetxea y Kepa Arronategi. Además, había un tercer terrorista aquel día. Arronategi fue detenido minutos después, tras darse a la fuga, por un motorista de la guardia urbana. Gogeaskoetxea fue arrestado en 2011 en Reino Unido y condenado a 92 años por estos hechos.

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