Feijóo pide prohibir que condenados por delitos de sangre vayan en listas electorales

La decisión de los populares, desvelada anoche por Alberto Núñez Feijóo en los informativos de Telecinco, eleva la presión sobre el PSOE y el Gobierno apenas unos días después de la tormenta desatada por la moción de censura pactada por los socialistas y EH Bildu en Pamplona y a escasos meses de las elecciones autonómicas vascas.

Las tres cuestiones tienen una importante carga simbólica. Las asociaciones de víctimas han pedido en reiteradas ocasiones que se impidan los homenajes a los terroristas. Pero no es sencillo. La mayoría de los 'ongi etorris' a expresos de ETA no pudieron ser sancionados y hace apenas unas semanas el Juzgado de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional absolvió a un joven acusado de enaltecimiento del terrorismo por realizar pintadas a favor de ETA en Ermua al entender que no suponían un delito y debía primar el derecho a la libertad de expresión.

La posibilidad de indultar a los condenados por terrorismo está más vinculada a la ley de amnistía y al acuerdo que negocia el Gobierno de Pedro Sánchez con Junts.

El PP considera que Sánchez compra la agenda del «radicalismo» y asume como propias iniciativas que pretenden «ni más ni menos que despenalizar las injurias a la Corona, los ultrajes a los símbolos nacionales y eliminar el delito de enaltecimiento del terrorismo». Feijóo hacía estas declaraciones después de que el PSOE aceptase unas horas antes la propuesta de Sumar para reformar el Código Penal y suprimir delitos de opinión como las injurias a la Corona, las ofensas a los sentimientos religiosos y los ultrajes a los símbolos nacionales.

El texto registrado por la formación de Yolanda Díaz también propone sustituir el delito de enaltecimiento del terrorismo por un agravante para dar a las víctimas «una protección reforzada», pero con el objetivo, señalan, de «evitar que se use para condenar a artistas», en alusión a casos como el del rapero Valtonyc. Un punto este que rechazó tajantemente, primero a título personal, el portavoz de los socialistas en el Congreso, Patxi López, y, posteriormente en nombre de todo el Grupo Socialista, la diputada Isaura Leal, encargada de fijar la postura de su formación en el debate.

La toma en consideración, que también apoyan Podemos tras su marcha al Grupo Mixto y otras formaciones pertenecientes al llamado bloque de investidura, tan solo es el primer paso antes de que el proyecto de ley llegue a ver la luz. Antes deberá pasar por la fase de comisiones, la misma donde encalló durante la legislatura pasada la derogación de la llamada 'ley mordaza', iniciativa de la que esta es heredera, por falta de acuerdo entre PSOE, Unidas Podemos, Esquerra y Bildu a cuenta de asuntos como el uso de pelotas de goma por parte de fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.

La tensión entre Gobierno y oposición también se trasladó a la sesión de control al Ejecutivo en el Senado. La crispación por la moción de censura en Pamplona fue constante en el turno de preguntas a once ministros pero tuvo su punto álgido durante el cara a cara de la senadora popular Marimar Blanco con el ministro de Política Territorial y Memoria Histórica, Ángel Víctor Torres.

Blanco acusó a los socialistas de esconder y mentir sobre el pacto y exhortó a Torres a responder «hasta donde está dispuesto a llegar el PSOE con tal de mantener en el poder a Sánchez». «Bildu está donde todos queríamos que estuviera, que es en la política», respondió de manera sucinta el ministro.