Urkullu condena la agresión al ertzaina de Vitoria y exige a Bildu que «deje de mirar hacia otro lado»

El nuevo episodio de acoso a un miembro del cuerpo autonómico, en este caso con el agravante de la violencia física, preocupa al Gobierno vasco, que no duda en señalar a la izquierda abertzale. Si la semana pasada era el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, el que decía que esa esfera política «tiene mucho que hacer para acabar con la intolerancia», ahora es el jefe del Ejecutivo autonómico quien apunta a la coalición de Arnaldo Otegi. «Atajar de raíz estos comportamientos es el mejor compromiso con la convivencia presente y futura», ha apelado a EH Bildu en una publicación en sus redes sociales.

El mandatario nacionalista ha transmitido su «apoyo, cariño y solidaridad» tanto a los dos ertzainas afectados como a sus familiares y compañeros de trabajo «que forman parte de esta institución respetada y querida por la inmensa mayoría de la sociedad vasca», en referencia a la Ertzaintza. El máximo responsable de la Policía vasca, el consejero Erkoreka, también ha denunciado unos hechos «sectarios, del todo intolerables» y sobre los que espera, dice, «que caiga el peso de la ley». El titular de Seguridad alerta de que en este caso «se ha cruzado la peligrosa raya de la violencia física» apenas unos días después del boicot en Mutriku.

La ministra de Justicia, Pilar Llop, que este lunes ha participado en San Sebastián en la apertura del curso de verano de la UPV/EHU 'Los retos globales de la Unión Europea', se ha referido también al grave incidente. Llop ha subrayado que todo lo que tiene que ver con la intolerancia y con expresiones que puedan significar odio deben «ser denunciadas y rechazadas», al tiempo que ha destacado «el importante el trabajo que hacen Fuerzas y cuerpos de Seguridad para mantener la convivencia en toda la sociedad». «Todo mi rechazo y mi apoyo a las víctimas porque esas conductas que hacen mucho daño en el Estado de Derecho, en la convivencia y a la gente joven», ha apostillado la ministra.

A la ola de solidaridad con el agente agredido se ha sumado el alcalde de Vitoria. Gorka Urtaran ha trasladado su «comprensión y cariño» al ertzaina tras unos hechos que considera «absolutamente intolerables». «Como alcalde y en nombre de toda la ciudad, nuestra condena más rotunda», ha expresado en declaraciones a los medios. El regidor de la capital alavesa ha lamentado que «no es la mejor forma de iniciar las fiestas» y ha pedido «pasarlo bien desde el respeto a los demás» porque «un ertzaina también es un gasteiztarra que tiene derecho a pasarlo bien con los amigos y la familia, y no tener miedo a ser agredido».

El diputado general de Álava, Ramiro González, ha apelado a «desterrar de Euskadi comportamientos violentos y antidemocráticos que no deben tener cabida en nuestra sociedad». También el delegado del Gobierno en el País Vasco, Denis Itxaso, ha lanzado un mensaje de apoyo al agente agredido y ha alertado de que este tipo de sucesos siguen ocurriendo. «El odio y la intransigencia aún presentan rescoldos en Euskadi que debemos seguir combatiendo. Las agresiones y menosprecios a la Ertzaintza representan un riesgo democrático si dejamos que prendan en la juventud vasca. Mi apoyo a todos los agentes», ha escrito el dirigente socialista en sus redes sociales.