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La S4C es una cadena de televisión minoritaria del Reino Unido que emite exclusivamente en lengua galesa desde hace nueve años. Y desde ayer es uno de los principales referentes que maneja el Parlamento vasco en sus planes para reformar EiTB. Eso deja entrever ... al menos que la Cámara autonómica, muy dada a invitar a expertos nacionales e internacionales a que acudan a su sede de Vitoria para opinar sobre los temas más variopintos, haya decidido esta vez enviar una delegación de cinco personas a Cardiff. Durante tres días visitarán, entre otros, el citado canal en busca de ideas para renovar la gestión de la radiotelevisión pública.
Dar un profundo vuelco al día a día del ente es uno de los grandes objetivos que se han marcado el Parlamento y el Gobierno autonómico para la presente legislatura. Se considera que la ley que rige el día a día de EiTB desde su fundación a comienzos de los 80 está obsoleta y se buscan nuevos enfoques para los medios públicos. Especialmente para los canales de televisión, que han registrado los peores datos de audiencia de su historia durante el último lustro. El objetivo es claro, pero queda lejos: la ponencia constituida en la Cámara de Vitoria con ese fin roza el bloqueo desde hace meses y amenaza con cerrarse en falso por la falta de consenso. Aún así, la delegación ha puesto rumbo a Gales.
En el viaje participan representantes de PNV, EH Bildu, PSE y PP. Todos los grupos del Parlamento excepto Elkarrekin Podemos, que no ha enviado a ningún portavoz por «problemas de agenda». El desplazamiento, que además de la visita a la sede de la S4C incluye otras a la delegación de la BBC en Cardiff, a productoras locales y al parlamento nacional, se produce pocos días antes de que la ponencia abierta para abordar la reforma de EiTB cumpla dos años desde su creación. Dos años en los que se han registrado más roces entre los grupos que avances reales hacia la renovación «integral» del ente público que se persigue.
De hecho, hasta la fecha la ponencia no ha ido más allá de reafirmarse en la metodología para reformar EiTB -que estaba pactada desde la pasada legislatura-, invitar a diferentes expertos y colectivos sociales a dar su opinión y plantear un modelo de participación ciudadana en el proceso. Escaso bagaje a poco más de un año de que la Cámara sea disuelta y cuando la idea inicial era que la nueva ley del ente estuviera lista a comienzos del presente ejercicio, según el calendario que se impusieron los propios partidos.
2 años lleva constituida la ponencia para reformar EiTB sin que haya registrado grandes avances. Según el calendario que aprobaron los grupos, la nueva ley del ente debería estar lista a comienzos de 2019, pero ni siquiera han iniciado las deliberaciones.
Lo que sí ha habido hasta ahora son polémicas. En septiembre de 2017 EH Bildu amenazó con abandonar la ponencia por el bajo ritmo al que avanzaba su trabajo, y en marzo de 2018 la coalición soberanista, PNV y PSE acusaron a Podemos de querer «dinamitar» el foro al airear parte de los debates, que se desarrollan a puerta cerrada. Todo, mientras la relación de la oposición con la directora de EiTB, Maite Iturbe, se ha ido deteriorando paulatinamente. De hecho, el pasado verano pactaron su reprobración, pero EH Bildu se echó atrás en el último momento.
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