Iñigo fernández de lucio
Martes, 25 de enero 2022, 00:28
Maiorga Ramírez (Pamplona, 1976) ha pasado de encabezar las listas de EH Bildu en Navarra en 2011 y ser candidato a secretario general de Eusko Alkartasuna (EA) en 2019 a enfrentarse a un expediente de expulsión de 12 años por parte de la dirección del ... partido, encabezada por Eba Blanco.
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- ¿Cómo afronta esta situación?
- Con enorme tristeza, porque se constata un deterioro profundo de la práctica democrática en el seno de EA. Máxime cuando se utilizan artimañas groseras como plantear un expediente de expulsión por denunciar la vulneración de derechos fundamentales democráticos de asociación que tanto los tribunales internos de EA como la Justicia ordinaria han ratificado en sus sentencias.
- Estos expedientes se plantean a un mes del congreso interno.
- Hay una indudable vocación de laminar nuestra participación normalizada en el congreso. No es tanto una actuación contra personas concretas sino contra la idea que representamos: estamos convencidos de la necesidad de una socialdemocracia vasca abertzale fuerte que actúe a modo de coalición y permita que EH Bildu aspire a ser una coalición plural que concite el apoyo de un amplio espectro ideológico de la ciudadanía vasca.
- ¿Qué papel debería jugar EH Bildu en toda esta controversia interna de su partido?
- Cuando se constata que se están produciendo vulneraciones de derechos fundamentales democráticos, entendemos que no se puede mirar hacia otro lado, por mucho que las tesis de aquellos que están vulnerando los derechos hagan más sencilla la estrategia política que la izquierda abertzale haya podido diseñar.
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- Han interpelado en alguna ocasión a Otegi directamente...
- Cada uno determinará la elocuencia de que el mismo día que nos comunicaban los 67 años de expulsión en total para aquellos que promulgamos una EA fuerte que trabaje en forma de coalición con EH Bildu, Otegi se estuviera sacando fotos con Eba Blanco en el congreso de Sortu.
- Dicen que la mayoría de afiliados apuesta por marcar perfil propio dentro de EH Bildu.
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- Sí.
- ¿No es demasiado tarde para eso?
- En absoluto. Nunca es tarde porque creo que es necesaria esa aportación de EA. Creemos que con la disolución de EA en EH Bildu, al PNV se le deja todo un carril de centroizquierda al que EH Bildu no debe ni puede renunciar, y menos a las puertas de nuevos ciclos electorales.
- ¿EH Bildu puede ocupar ese carril de centroizquierda que menciona si Sortu es la corriente mayoritaria?
- Creo que la aportación de Sortu en EH Bildu es fundamental. Es trascendental una Sortu fuerte, como lo es también una EA fuerte y con personalidad propia. Pero la izquierda abertzale ha copado de una manera absolutamente hegemónica el conjunto de las estructuras y cargos directivos de EH Bildu, lo cual está procurando algo que no es deseable, a mi juicio, para la coalición.
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- ¿El qué?
- La identificación de EH Bildu con la izquierda abertzale. Eso propicia una visión reduccionista de una coalición amplia donde deberían converger las inquietudes y voluntades de una ciudadanía que ideológicamente pueda situarse desde el centroizquierda hasta la izquierda más ortodoxa.
- ¿Se siente cómodo en una coalición en la que el exjefe de ETA David Pla es el nuevo estratega de Sortu?
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- Creo que Sortu está optando por reforzar su perfil más ortodoxo y afianzar perfiles que han sido protagonistas de la izquierda abertzale en su actuación histórica. Le conozco personalmente y tiene todo el derecho, por supuesto, a participar políticamente. Lo que me preocupa es que toda esa vocación de Sortu no tiene un contrapeso en una EA fuerte y determinada para permitir a EH Bildu proyectar una gran amplitud ideológica. Por eso creemos que es un error la deriva de la disolución de EA en EH Bildu que está llevando a cabo la actual dirección de Eba Blanco.
- ¿Qué le parecen las manifestaciones de apoyo de sectores de Sortu a históricos de ETA como 'Mikel Antza' o Troitiño?
- De Eusko Alkartasuna, una de las cosas que muchos echamos de menos es el bagaje histórico en materia de la defensa a ultranza de todos los derechos humanos y de rechazo y condena de la vulneración de los mismos.
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- ¿A qué se refiere?
- En el caso de 'Mikel Antza' es evidente que está habiendo por parte de la Justicia española una actuación que tiene que ver más con la venganza que con la justicia. Pero ello no implica un reconocimiento de EA a su trayectoria política, y en este caso de pertenencia a ETA, porque siempre nos han tenido enfrente. Todos los derechos para todas las personas, pero sin que ello implique un reconocimiento de sus responsabilidades pasadas.
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