La Diputación de Gipuzkoa choca con el Gobierno vasco por la conexión del TAV con Navarra

Además de insistir en que conectar la 'Y' vasca con Pamplona a través de Álava carece de «funcionalidad», la máxima dirigente guipuzcoana se ha animado hoy a interpretar las declaraciones realizadas la víspera por el lehendakari en una entrevista radiofónica en las que advertía de que la «codecisión» sobre el trazado definitivo será cosa del Gobierno central, el vasco y el navarro en un encuentro que mantendrán, si no hay más retrasos, durante el año que viene. El mensaje era también una llamada implícita a las diputaciones implicadas a que dejen de agitar un asunto que han elevado a la categoría de pulso territorial en el que, como ha ocurrido con todo el proyecto de la alta velocidad, deberán acatar lo que se decida. Para Mendoza lo que quiere decir Pradales es simplemente que «las instituciones vascas no van a ser simples espectadoras».

Pese a que el proyecto del TAV ha pasado momentos críticos durante las tres legislaturas de Urkullu es en la llegada de Pradales a la Lehendakaritza, con la obra encarrilada, cuando está generando roces institucionales inéditos en Euskadi. A la conexión con Navarra se le viene dando vueltas desde hace casi veinte años sin llegar a concretar nada y lo que está ahora mismo sobre la mesa es el tercer estudio de alternativas, publicado en 2018. El informe ofrece la posibilidad de ejecutar el enlace calcando la vía ferroviaria convencional por Vitoria y la Sakana o llevar el tren a través de Ezkio-Itsaso y la sierra de Aralar, aunque los técnicos de Fomento se decantan abiertamente por la primera esgrimiendo argumentos económicos y técnicos. La alternativa de Álava costaría tres veces menos -580 millones frente a 1.705- porque la obra es más sencilla. No parecía haber dudas... y sigue sin haberlas.

En 2022 parecía haber llegado el momento de decidir. El Ministerio de Transportes buscaba fecha para una reunión a tres bandas con Euskadi y Navarra en la que anunciar que la obra se ponía en marcha, pero empezaron las suspicacias. El PNV alavés se quedó solo defiendo la ruta de Vitoria mientras el resto del partido apostaba por Gipuzkoa. En Navarra Geroa Bai, socio del PSN, también prefería la opción que no avalan los informes técnicos. Demasiadas dudas a las puertas del carrusel electoral que estaba por llegar, así que se optó por ganar tiempo. El Gobierno central anunció que iba a realizar estudios complementarios en Aralar para tener más datos antes de decantarse. Y en esas estamos: las catas iban a culminarse a finales de este año pero se prolongarán unos meses más.

La Diputación de Gipuzkoa ha empezado a tensar la cuerda con Lakua este verano. Mendoza consideró en julio que llevar el TAV por Ezkio-Itsaso hacia Pamplona es «irrenunciable» basándose en que es 20 minutos más rápido que hacerlo por Vitoria. También en una batería de alegaciones que el Gobierno vasco registró en 2018, cuando conoció el estudio de alternativas de Fomento. El informe se decanta por la opción guipuzcoana asegurando que, entre otros, hacer un túnel de 22 kilómetros en Aralar tendrá «menos impacto ambiental».

La diputada general se basa en ese informe elaborado por el anterior Ejecutivo de Urkullu, cuando el Departamento de Transportes lo lideraba la jeltzale Arantxa Tapia, para repetir, hoy nuevamente, que el Gobierno vasco «abraza» las tesis de su Ejecutivo. Pradales evitó posicionarse el lunes y aseguró que no habrá decisión final hasta que no se culminen las catas que se están realizando. Y lo ha repetido esta mañana su portavoz. «Hasta contar con toda la información no nos vamos a pronunciar», ha dicho María Ubarretxena tras apelar a que la decisión se tome «con responsabilidad y seriedad». También se ha expresado en los mismos términos durante las últimas semanas la nueva responsable de la cartera de Movilidad Sostenible, la socialista Susana García Chueca.

En plena marejada interna el lehendakari viaja mañana a Pamplona para mantener su primer encuentro oficial con la presidenta navarra, María Chivite. La conexión del TAV será una de las cuestiones principales que se pondrá sobre la mesa, aunque en el territorio vecino la tesis es la misma que en Ajuria Enea así que no es descartable una declaración conjunta llamando otra vez a la calma. El pasado domingo, el una entrevista concedida al 'Diario Vasco', Chivite también apostó por esperar. «Sería irresponsable decantarnos ahora por conectar por Ezkio-Itsaso o por Vitoria cuando faltan datos».