Revilla votará en contra y deja en manos de Teruel Existe y el BNG la investidura

La primera ficha del dominó cayó poco después de las 20.30 horas, cuando la dirección del PRC de Miguel Ángel Revilla confirmó que votara 'no'. La decisión de los regionalistas cántabros estaba en el aire, y de hecho, ha ido oscilando desde el 10-N. En un primer momento se dio por hecho que facilitaría la reelección de Sánchez, pero el acercamiento entre el PSOE y ERC ha ido moviendo sus posiciones. En su discurso de Nochevieja, Revilla ya avisó: «Ningún AVE justifica que nos carguemos la unidad de España». O lo que es lo mismo, que el paquete de inversiones que estaba negociando con Sánchez no era suficiente para frenar la brecha interna que se le podría abrir en Cantabria por las cesiones a ERC.

La negativa del PRC lleva todo al límite. En estos momentos, Sánchez tiene asegurados 165 votos a favor y 164 en contra. Hay 18 abstenciones previstas. A los 13 de Esquerra hay que sumar los 5 de EH Bildu. Quedan tres votos por decidir: Teruel Existe, Coalición Canaria y BNG.

En principio, el de CC se inclina hacia el 'no'. Durante la rueda de prensa que ofreció tras su encuentro con Felipe VI, su diputada, Ana Oramas, ya confesó que tiene una opinión personal «negativa» sobre el acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos. Y esa sensación se ha ido acrecentando durante los últimos días. También ponía como condición conocer cuál será la posición del Gobierno en una obligada y futura negociación sobre el sistema de financiación autonómica, ya que rechaza hablar de negociación bilateral con algunas comunidades autónomas. La ejecutiva de su partido se reúne hoy para decidir el sentido de su voto. Pero todas las opciones parecen inclinarse hacia el 'no'.

Así que todas las miradas se vuelven hacia Teruel Existe y el BNG. En el caso de que Coalición Canaria vote finalmente que 'no', Sánchez necesitaría que al menos una de estas dos formaciones diese un 'sí' explícito. Fuentes de la formación turolense recalcaron este jueves a EL CORREO que mientras los pactos alcanzados con ERC estén dentro de la Constitución no ven problemas. Y leído el documento hecho público este jueves, señalaron que no le veían tantos recelos como Revilla. De hecho, el PSOE no tardó en informar que hoy a las 14.00 horas, Adriana Lastra y los representantes de Teruel Existe rubricarán el acuerdo alcanzado entre ambas partes.

De confirmarse el 'sí' de los turolenses, Sánchez tendría casi garantizada su investidura. Todo dependería del BNG, que mantiene la ambigüedad. Al candidato del PSOE le valdría con que los nacionalistas gallegos se abstuvieran para seguir en La Moncloa.

Su diputado, Néstor Rego, señaló este jueves que su «voto favorable» para Sánchez dependerá del compromiso del PSOE con la agenda gallega. «La pelota está en su tejado», argumentó. En una entrevista en la Ser, subrayó que «si el PSOE no se mueve, será imposible un voto favorable del BNG». Asimismo, explicó que la formación «siempre dijo que tenía voluntad de diálogo y de colaborar», pero que no va a dar «un cheque en blanco».

Lejos queda el pasado verano, con un escenario en el que los socialistas tan solo necesitaban del apoyo de Unidas Podemos y la abstención de ERC y PNV. Unas cuentas más fáciles y con un coste político menor, cuando el propio Gabriel Rufián, portavoz de los soberanistas en el Congreso, prácticamente había regalado la abstención de los 15 diputados de su formación (su máximo histórico en la Cámara baja) durante el anterior intento de investidura.

Pero entonces el Tribunal Supremo aún no había sentenciado por sedición y malversación a su líder Oriol Junqueras en el juicio del 'procés', lo que enfangó aún más el terreno de juego político.