Covite denuncia dos nuevos terceros grados a «etarras no arrepentidos»

Jesús J. Hernández

Jueves, 20 de febrero 2025 | Actualizado 21/02/2025 10:09h.

Comenta

El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) ha denunciado este jueves que han accedido al tercer grado «otros dos etarras vinculados a la izquierda abertzale y, por tanto, no arrepentidos». La Consejería de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno vasco ha concedido tres progresiones más: Jon Zubiaurre Aguirre, Javier Zabalo Beitia e Iván Apaolaza Sancho. Sin embargo, la principal asociación vasca de víctimas recalca que Apaolaza «lleva desvinculado de la izquierda abertzale desde finales de 2019 y dando ciertas muestras de arrepentimiento de sus crímenes, lo cual sí le haría merecedor de un tercer grado».

Por su parte, la familia de Pedro Antonio Blanco, una de las víctimas de Apaolaza, se mostró contraria a la progresión de grado ya que «ha cumplido solo 17 de los 30 años a los que está condenado. Además, insistieron en que »no ha colaborado con la Justicia, aún teniendo la oportunidad para ello, recientemente«. A su juicio, »no merece ningún beneficio penitenciario«.

La presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, ha insistido: «Es público y notorio desde hace muchos años que la izquierda abertzale prohíbe a los presos expresamente, y sus líderes se encargan de recordárnoslo constantemente, el arrepentimiento y la colaboración con la justicia, y sin cumplir con estos dos requisitos no deberían progresar en grado, puesto que así está establecido en la ley». Siguiendo esos parámetros, rechazan dos de las tres progresiones.

A su juicio, «Jon Zubiaurre y Javier Zabalo siguen vinculados a la izquierda abertzale y aparecen en las listas más actualizadas de Etxerat, donde son calificados como presos políticos y son tratados como héroes, por lo que no hay mayor prueba de que no están arrepentidos de sus crímenes». En cambio, Apaolaza, «no aparece desde enero de 2020, lo cual es un indicativo importante de su desvinculación de las estructuras de control de los presos de ETA de la izquierda abertzale».

Para la principal asociación vasca de víctimas del terrorismo, «la política penitenciaria de concesión de terceros grados fraudulentos a etarras que no están arrepentidos supone un ataque frontal al derecho de las víctimas a la justicia. Se está siguiendo a rajatabla una de las exigencias de ETA para dejar de matar, que era vaciar las cárceles», lamentan.

Finalmente, Covite lamenta que «este fraude se comete con el beneplácito de todas las instituciones, incluso de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, que es quien debe velar por nuestro derecho a la justicia en la fase de ejecución de las condenas, ya que en esta fase se nos niega el derecho a estar personadas. Pero sabemos que la Fiscalía últimamente no solo no vela por nuestros derechos, sino que avala terceros grados a etarras sabiendo que no están arrepentidos».