El Congreso rinde homenaje a las víctimas del terrorismo sin las principales asociaciones

En el acto, que se ha abierto y cerrado con una pieza musical, se ha guardado un minuto de silencio por las víctimas. Han acudido miembros de todos los partidos políticos salvo Vox. Por EH Bildu ha acudido su portavoz, Mertxe Aizpurua. En el tributo ha intervenido la presidenta del Congreso, Francina Armengol, quien ha recordado emocionada a los dos guardias civiles asesinados en Baleares cuando ella era presidenta de la comunidad. «Lo viví todo como una pesadilla, como un mal sueño. Recuerdo el dolor pero también la entereza de las familias». Por aquel último atentado mortal de ETA «todavía no se ha hecho justicia».

Juan Benito, presidente de la FVT, ha recordado «el atentado yihadista de hace 20 años que puso de manfiesto la fortaleza de nuestra democracia y pudo reaccionar ante aquella infamia». Ha reclamado que «se reconozca el lugar que corresponde a las víctimas» y mandó «todo nuestro apoyo a quienes han muerto en actos de terrorismo», entre los que citó al vasco Iban Ilarramendi y su pareja, que murieron a manos de Hamas y a los que lo han hecho a manos del Estado Islámico (Daesh) en Afganistán. También ha recordado «los 466 actos de homenaje a ETA, como he denunciado Covite». Benito ha apelado «a que ustedes -los representantes políticos- nos tengan en su agenda normativa para proteger a las víctimas y que no consideren que ya se ha hecho por ellas todo lo necesario». Y ha zanjado que «el Estado debe luchar contra el terrorismo pero también dar cobertura a quienes lo sufren».

Entre los ausentes, estaban las dos principales asociaciones de víctimas: la AVT y Covite. Desde el Colectivo de Víctimas del Terrorismo que no ha ido «nunca» a este tributo anual porque «homenajear a las víctimas en una institución en la que tienen representación partidos políticos que legitiman la existencia de ETA y no condenan la violencia terrorista es un ejercicio de cinismo». Según ha destacado su presidenta, Consuelo Ordóñez, «mientras EH Bildu siga legitimando a ETA y negando que sus crímenes fueran actos de terrorismo, Covite seguirá sin asistir. Siempre hemos criticado y lamentado que los brazos políticos de ETA fueran legalizados ya que fue la primera exigencia de ETA para abandonar la violencia terrorista«. Covite ha censurado »no sólo la impunidad del entorno político de ETA, sino también la de los terroristas huidos, cerca de una treintena según Interior, a los que no se detiene, y algunos de ellos tienen delitos de sangre«.

La AVT, por su parte, ha decidido no acudir por quinto año consecutivo al homenaje del Congreso porque «no se puede rendir homenaje a las víctimas del terrorismo gobernando con los representantes de ETA en las instituciones. Pero no sólo eso: no se puede rendir homenaje a las víctimas un día y ponerles piedras en el camino el resto del año». A juicio de la AVT, «este Gobierno acumula ya demasiadas promesas incumplidas a las víctimas del terrorismo: no se ha actualizado la ley y no se ha hecho absolutamente nada por acabar con los homenajes a etarras. Se quiere despenalizar el enaltecimiento del terrorismo, con las graves consecuencias que tendría para las condenas por yihadismo». LA AVT ha asegurado finalmente que «cada vez está resultando más complicada la supervivencia de las asociaciones de víctimas del terrorismo. Obviamente, para el Gobierno somos una piedra en el zapato, pero dar la espalda a las víctimas es dar la espalda a muchísimos ciudadanos de este país».