El CGPJ activa la renovación de tres puestos clave de la judicatura vasca

El entendimiento entre las dos principales fuerzas políticas, suscrito en junio, fue recibido con alivio por la judicatura vasca. Cuando se conoció el desbloqueo, el presidente del Tribunal Superior, Iñaki Subijana, no ocultó su «satisfacción» tras admitir que este bloqueo «estaba generando una clara desconfianza cívica hacia la actuación de juzgados y tribunales».

El propio Subijana esquivó ese bloqueo por poco. Fue elegido al frente del TSJPV en 2021, con el CGPJ ya en funciones pero apenas tres semanas antes de que entrara en vigor la reforma de PSOE y Unidas Podemos para que el órgano de gobierno no pudiera realizar nombramientos mientras permaneciera en la interinidad. Llegó al cargo en sustitución de Juan Luis Ibarra, jubilado en 2020, y tras un paréntesis de nueve meses en los que el Superior estuvo pilotado por Garbiñe Biurrun.

Sin embargo, otras tres plazas clave no llegaron a tiempo. Una de ellas es precisamente la que Subijana dejó vacante al asumir su nueva responsabilidad: la presidencia de la Audiencia de Gipuzkoa. Su mandato acabó en abril de 2021 y desde entonces este cargo lo desempeña en funciones Yolanda Domeño, presidenta de la Sección Segunda de ese tribunal. Esta situación tiene su réplica en Álava. La magistrada Mercedes Guerrero concluyó su segundo mandato en enero de 2021 y desde entonces permanece al frente de forma interina.

La tercera vacante pendiente de cubrir es la presidencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJPV, con el ciclo expirado desde octubre de 2020. Su máximo representante, el juez Luis Ángel Garrido, tuvo un inusitado protagonismo durante la pandemia del covid, ya que tumbó en varias ocasiones las restricciones decretadas por el Gobierno vasco -sobre todo, el cierre de la hostelería- y llegó a poner en cuestión la formación de los epidemiólogos.