Casado equipara el alojamiento de Ayuso con el de Calvo en una vivienda pública

Díaz Ayuso ocupa un apartamento de la cadena Room Mate desde el 16 de marzo, día en el que se supo que había dado positivo en coronavirus. El responsable del grupo hotelero, sin embargo, Kike Sarasola, sostuvo ayer que antes de que el 14 de ese mes se decretara el estado de alarma, la dirigente popular ya buscaba un espacio en el que residir e instalar los equipos técnicos para el seguimiento de la crisis ante la previsión del confinamiento. De ser así, la idea de salir de su domicilio habría sido anterior a la confirmación del contagio. Hoy por hoy, además, la presidenta de la Comunidad de Madrid, superada la cuarentena, continúa en este establecimiento.

Ante la polémica por la estancia y la exigencia de la oposición de explicaciones, tanto el Gobierno de la Comunidad de Madrid como Room Mate Group han insistido estos días en que será Díaz Ayuso quien sufrague los gastos: 2.400 euros al mes. Sarasola explicó ayer que los 80 que abonará por noche, y que incluyen el apartamento y un salón en otro alojamiento para trabajar, se deben a que se trata de una larga estancia. El precio habitual es de 200 euros por día.

«Que un responsable público decida pagar y vivir momentáneamente en algún sitio que no sea su casa, pues creo que entra dentro de la esfera privada», ha replicado Casado. El líder de los populares, además, ha reiterado que Díaz Ayuso «necesitaba estar fuera de su casa para no contagiar a su madre». «Tanto ella como cualquier cargo público del PP se comprometen por escrito -ha añadido- a velar por la ejemplaridad, la honestidad y la transparencia en el ejercicio de su función pública».

La controversia se complicó el martes, después de que el Ejecutivo regional retirara del Portal de la Contratación Pública una adjudicación a nombre de Room Mate -aparecía, en realidad, como Rom Mate- por importe de 565.749,58 euros para la puesta en marcha de hoteles como espacios de uso residencial de personas mayores.

Después de que Vanity Fair informara sobre ello, desde el Gobierno madrileño aseguraron que se trató de «un error» humano que quedó subsanado y que la cadena de Sarasola ha cedido sus espacios gratis. «Nunca me han adjudicado un solo euro», defendió el empresario.

El contrato que sustituyó al de «Rom Mate» va finalmente dirigido a la Coordinadora del Tercer Sector para garantizar los servicios sanitarios y de otra índole en esos alojamientos, pero la cantidad también aparece cambiada: 240.443,57 euros. Según el Ejecutivo, porque sólo uno de los dos hoteles cedidos fue finalmente utilizado.