Bildu y PNV chocan por el impacto de ETA en el retraso de las obras del TAV

El debate lo puso sobre la mesa el 'número dos' de EH Bildu en el Parlamento, Mikel Otero, después de que el consejero de Transportes, el socialista Iñaki Arriola, reconociera el pasado jueves que poner plazos a la ejecución de la 'Y' vasca es ahora mismo una absoluta quimera visto que el trabajo pendiente aún es ingente.

Otero respondió a Arriola pidiéndole que «no diga memeces» y que el Gobierno «asuma su responsabilidad 30 años después de proyectar la obra y 15 después de poner la primera piedra».

La réplica fue de la eurodiputada del PNV Izaskun Bilbao. Reprochó al portavoz de Bildu su «amnesia» por obviar que ETA está detrás de «parte de los retrasos, sobrecostes económicos y un dramático coste en vidas humanas», en alusión al asesinato del empresario Inaxio Uria. «El retraso del TAV es ETA. Di que sí, Izaskun! Nivelazo!», respondió Otero. «Nivelazo es insultar cuando no hay argumentos y no tener la dignidad de reconocer y asumir los gravísimos errores y responsabilidad que tenéis vosotros en este problema. Lo habitual», zanjó Bilbao.

No fue la única muestra de la tensión entre PNV y Bildu. El portavoz parlamentario jeltzale, Joseba Egibar, censuró ayer en Radio Euskadi que la izquierda abertzale ha adoptado una posición de «crítica sistémica» hacia el Ejecutivo vasco para «buscar un escenario de estallido social que provoque que quien está en el Gobierno caiga», al más puro estilo de «los manuales de los viejos marxistas».