o. igea | x.garmendia
Viernes, 18 de junio 2021, 00:22
José Luis Bilbao, ex diputado general de Bizkaia, seguirá presidiendo el Tribunal Vasco de Cuentas Pública (TVCP) al menos hasta octubre pese a que su mandato expiraba a comienzos del mes que viene. Se trata de una prórroga automática hasta que el Parlamento designe a ... su sucesor. No lo hará mientras no culmine la reforma de la ley que regula el organismo. La modificación busca, entre otros asuntos, poner coto a las 'puertas giratorias'.
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El nombramiento de Bilbao en 2015, dos días después de abandonar la Diputación, provocó una fuerte tormenta política y activó el proceso parlamentario para modificar los criterios para elegir al presidente del organismo, pero el adelanto electoral impidió que los trabajos se culminaran. EH Bildu y PP volvieron a registrar la propuesta de reforma en el inicio de este mandato y ahora parece que sí cristalizará.
Las modificaciones planteadas, aparentemente con el visto bueno del PNV, pondrán coto a las 'puertas giratorias' fijando, entre otros requisitos, un plazo de seis años para que un cargo público pueda ejercer como miembro del TVCP. El consenso parece total y solo falta que se culminen los trámites. El Parlamento constituye hoy la ponencia que definirá el texto definitivo de la nueva ley, que luego tendrá que ser aprobada por el pleno.
Además de fijar el plazo de carencia para los cargos públicos, la reforma planteada quiere modificar el proceso para elegir a los integrantes del TVCP. Los partidos seguirían manteniendo sus cuotas a la hora de plantear nombres, pero se quiere reforzar la mayoría parlamentaria. Pasaría de ser simple a requerirse el apoyo de tres quintos del Parlamento –45 votos– para designar presidente. PNV y PSE suman ahora 41 escaños, por lo que necesitarían un apoyo externo.
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Los dos partidos que sustentan el Gobierno de Iñigo Urkullu votaron ayer en contra de una propuesta de EH Bildu para crear una oficina anticorrupción. Una iniciativa a la que PNV y PSE habían dado su aval inicial en la pasada legislatura. Un cambio de criterio, «difícil de entender» para la oposición, que jeltzales y socialistas encuadraron en la supuesta duplicidad de órganos que se generaría y en un intento de frenar la «estrategia» política de la formación soberanista.
Dos años y medio después del anterior intento, el parlamentario independentista Josu Estarrona trató de reactivar el procedimiento legislativo con distinto resultado. «¿Qué ha cambiado desde entonces? ¿La mayoría absoluta? ¿Que estábamos en medio del juicio del 'caso De Miguel' con los principales imputados desfilando por el juzgado? Sólo Elkarrekin Podemos-IU apoyó la iniciativa. Miren Gorrotxategi se escudó en que los mecanismos en vigor no son más que «controles 'a posteriori'» que no permiten la prevención de irregularidades.
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Nada alteró las posiciones de PNV y PSE, decididos a tumbar la propuesta pese a compartir la finalidad. El jeltzale Jon Andoni Atutxa apreciaba un modelo «más represivo que preventivo» y recordaba la existencia de órganos como el Tribunal Vasco de Cuentas y de funcionarios como los secretarios e interventores municipales. Más vehemente se mostró el socialista Ekain Rico, quien decía no poder compartir el «certificado de defunción» de los mecanismos actuales ni la «sombra de sospecha que se quiere lanzar» sobre ellos. Ambos criticaron que EH Bildu haya «descongelado» esta propuesta «245 días después» de su registro como parte de su «estrategia» política.
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