La Audiencia de Álava decidirá mañana si entran ya en prisión De Miguel y otros cuatro condenados

La providencia redactada por la Audiencia de Álava cita a las nueve y media de la mañana a estos cinco condenados y a sus abogados, así como a Josu Montes y a Jon Echaburu. Para estos dos últimos solo pide la retirada del pasaporte. La vistilla se hará a puerta cerrada.

La sentencia hecha pública el martes no es firme. Los condenados tienen aún margen para recurrir ante el Supremo. Las defensas aún no han confirmado si darán ese paso, pero se da por hecho que será así. El alto tribunal puede tardar alrededor de un año en resolver.

La sentencia dictada por el tribunal presidido por Jaime Tapia sitúa en la cúspide de la trama a De Miguel, Telleria y Ochandiano. El escrito judicial considera que el segundo trimestre de 2005 «idearon la creación de una red societaria y personal organizada en torno a sí mismos para aprovechar las relaciones políticas y administrativas» que mantuvieron «por su pertenencia al PNV». Los jueces han impuesto a De Miguel trece años de prisión -aunque establece que cumplirá un «máximo» de nueve-; a Ochandiano siete; y a Telleria, seis. Los tres formaban parte de la dirección del PNV en Álava.

Los otros dos condenados para los que el fiscal Josu Izaguirre pide la entrada en prisión son Iñaki San Juan y Xabier Sánchez Robles. El primero ha sido condenado a cinco años de cárcel. Exconcejal del PNV en Leioa, era el encargado de administrar algunas de las empresas investigadas por el pago de comisiones. Sánchez Robles era director de Juventud en el Gobierno de Ibarretxe. Los jueces le han impuesto siete años de prisión, más que al propio Telleria. Se le acusa de abrir la puerta de la Administración vasca a De Miguel.

Los dos principales argumentos que se suelen analizar para fijar la entrada en prisión antes de que el Tribunal Supremo haga definitiva la sentencia son el riesgo de fuga y la posible reiteración delictiva.

En el caso de Josu Montes y Jon Echaburu, la Fiscalía pide medidas cautelares menores. Montes estuvo al frente de algunas empresas implicadas en la red corrupta y ha sido condenado a cuatro años de prisión. A Echaburu le han caído dos años y cinco meses de cárcel. Contratista habitual de la Administración, era socio de Ainhoa Alberdi, la abogada que destapó la trama al denunciar que le habían exigido una comisión.

El resto de los quince acusados que han sido condenados por la Audiencia de Álava no han recibido penas que impliquen su entrada en prisión, bien porque son inferiores a los dos años o porque solo son de inhabilitación.

El ingreso inmediato en la cárcel de De Miguel, Telleria, Ochandiano, San Juan y Sánchez Robles supondría un mazazo añadido para el PNV. El partido liderado por Andoni Ortuzar ha visto cómo su estrategia basada en diferenciarse del resto de la formaciones en lo que se refiere a la corrupción ha recibido un golpe directo. Aunque la sentencia no establece en ningún momento que el PNV se beneficiase de los negocios puestos en marcha por la trama, sí evidencia que los controles puestos en marcha por los jeltzales no fueron los adecuados.