Aragonès y Otxandiano refuerzan su unidad estratégica en el Palau de la Generalitat

La visita a Barcelona forma parte de toda una estrategia planteada por EH Bildu para dar a conocer a un candidato, que como el resto, no es especialmente conocido por la ciudadanía vasca. Entrevistarse además en la sede oficial del Ejecutivo catalán es un claro gesto por parte de ERC para dotar a Otxandiano de una imagen más institucional. Por poner un ejemplo, Iñigo Urkullu se ha entrevistado en dos ocasiones con Aragonès pero nunca en el Palau. La primera en un acto de la comunidad de los Pirineos en la localidad gerundense de Alt y hace escasas semanas en el Parlamento Europeo.

Ante unos comicios que se prevén igualados, el objetivo de EH Bildu es trasladar la imagen de que es un partido capacitado para llevar las riendas del Gobierno. Y ahí aparece como modelo ERC. Las dos formaciones mantienen una unidad de acción en el Congreso, previsiblemente formarán con el BNG coalición de cara a las europeas y no ocultan que quieren presionar para que Pedro Sánchez avance en el reconocimiento plurinacional del Estado.

En todo caso, EH Bildu ha recalcado que los retos son «globales» y tienen que ver con «el cambio climático, la digitalización, la transformación de los cuidados o la gobernanza». Otxandiano, ha dicho la coalición, «ha conocido de primera mano las políticas públicas implementadas por el Govern y los aprendizajes de los últimos años».