Sara Buesa: «La auténtica tolerancia no es permitir todo tipo de comportamiento»

Sara Buesa planteó que teniendo presentes «todas las miradas podremos abrir posibilidades integradoras y construir una sociedad inclusiva en que todas las personas podamos desarrollar una vida buena y participar por igual de un respaldo comunitario. Para eso, se necesitan cambios. «Respetar la diversidad, defender la dignidad y la igualdad de derechos de todas la ciudadanía exige compromisos éticos y no meramente estéticos. Hay osicionarse claramente en contra de todas las vulneraciones de derechos y desigualdades que se producen y no permitir que se homenajee a personas que han cometido crímenes o hacer frente a los discursos que justifican el uso de la violencia», apuntó en evidente referencia a la actitud de la izquierda abertzale sobre los 'ongi etorri'.

«Sólo así será posible reconectar los lazos que se han roto y crear un teijdo comunitario en que todas las personas nos sintamos parte y protegidas. Una vida social saludable solo se consigue cuando en el espejo de cada alma la comunidad entera encuentra su reflejo y cuando la virtud de cada uno vive en toda la comunidad», comentó la hija del histórico líder del PSE.

Diez años después del cese definitivo de la violencia y cuando han trascurrido tres desde la simbólica entrega de las armas, Sara Buesa cree que es momento de que la sociedad vasca inice el camino hacia su futuro. «Podemos elegir qué tipo de comunidad queremos ser. Una oscura en que una parte de la ciudadanía no pueda mostrar su luz, una comunidad monocolor o una viva en la que todas las personas pueda brillar con luz propia», remarcó en un acto al que acudieron la vicelehendakari Idoia Mendia, la consejera Beatriz Artolazabal, el diputado general de Álava, Ramiro González, y el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran.

«El proyecto político que ETA trató de imponer mediante la violencia terrorista era un proyecto sectario, basado en una visión idílica de una sociedad vasca homogénea. De una comunidad 'pura', donde las diferencias de identidad eran muros defensivos que excluían lo que no formaba parte de ella», recordó Buesa.

En el uso de la palabra le siguió el filósofo Daniel Innerarity, quien subrayó que las víctimas no se pueden considerar héroes. «Si una comunidad cuenta su pasado desde la perspectiva de quienes han padecido tiene más oportunidades de construir su futuro inclusivamente», sostuvo el profesor.