Andueza destaca la «solidez» de un PSE que tiene «muchos espacios por ganar»

«Creo que podemos decir que celebramos este comité nacional en un momento muy feliz». Efectivamente, el secretario general, Eneko Andueza, es un hombre feliz. Y no es que tenga reparos en ocultarlo, es que hace todo lo posible por evidenciarlo. «Tan sólo han pasado dos años y siete meses desde que esta comisión ejecutiva nacional tomara las riendas del partido tras el IX Congreso del PSE-EE. Dos años y siete meses en los que hemos tenido que afrontar cuatro comicios electorales concentrados en poco más de un año. Un ciclo electoral en el que el Partido Socialista de Euskadi ha demostrado su solidez y no ha parado de crecer», ensalzó.

El comité nacional celebrado este martes por la tarde en Bilbao coincidió, precisamente, con la toma de posesión de los consejeros de un Gobierno vasco liderado por el jeltzale Imanol Pradales pero en el que los socialistas «vamos a tener más proyección, más peso político, más relevancia y una mayor responsabilidad». Tanto en las formas, ya que el PSE tiene cinco consejeros (dos más que en el anterior gobierno de Urkullu), como en el fondo, al gestionar áreas de enorme relevancia como la gestión de los fondos europeos.

Andueza explicó que durante las negociaciones con el PNV fueron «exigentes y firmes para lograr el espacio que por justicia nos merecíamos al haberlo ganado en las urnas». En este sentido, destacó que el acuerdo de Gobierno cuenta como «columna vertebral» con las propuestas «nucleares» que los socialistas prometieron en campaña.

A saber: crear 2.000 nuevas plazas estructurales para profesionales en Osakidetza; transporte público gratuito para menores de 26 años y personas desempleadas; dedicar la mitad de las viviendas de alquiler protegido para la juventud; implicar a nuestras cajas de ahorros en el impulso de proyectos industriales que favorezcan la descarbonización; o devolver Emakunde a Lehendakaritza».

El secretario general del PSE dedicó parte de su intervención a explicar su decisión de no formar parte del nuevo Gobierno rechazando ser el nuevo vicelehendakari segundo. «La política también es generosidad. También es saber renunciar a las aspiraciones personales que cualquiera, legítimamente, pueda tener, para darle prioridad a ese proyecto común que nos une que no es otro que el del Partido Socialista de Euskadi-Euskadiko Ezkerra. Lo tuve muy claro desde el principio», explicó.

Tras subrayar que siempre tuvo «muy claro» que el vicelehendakari debía ser Mikel Torres «por trayectoria, capacidad, confianza, amistad, respeto y cariño», recalcó que se queda al frente del partido –y de la portavocía socialista del Parlamento vasco– porque «debemos recuperar espacios y conquistar otros nuevos». Respecto al papel del PSE en el futuro Gobierno vasco. de coalición, aseguró que «garantizaremos que estamos a lo que hay que estar, a centrarse en lo que verdaderamente importa a la gente».

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