Sollube, un puerto mítico de la costa vizcaína

El pequeño reto comienza en Mungia. Allí comenzamos a pedalear por la BI-631 hacia Larrauri. Con un perfecto asfalto, el primer kilómetro tiene una media del 6%. Es un calentamiento, ya que pronto llegan las rampas por encima del 9% hasta coronar un pequeño collado pasado el kilómetro 3. Es una carretera bastante transitada. La ascensión se adentra por zonas muy arboladas donde predominan los eucaliptos.

En bici

• Distancia 32 km.

• Altitud máxima 684 metros.

• Desnivel 386m+.

• Pendiente máxima 13%.

Tras esas duras rampas, hay cinco kilómetros muy suaves, incluso en descenso. Unos pocos metros más y ya habremos coronado parte del puerto. Vemos la señal, estamos a 430 metros de altitud. Hay que girar a la derecha. Solo quedan cuatro kilómetros y 253 metros de ascensión, aunque son bastante duros. Es el mejor momento para disfrutar de las vistas y sacar unas fotos. Desde este punto se ve Bermeo. Y al fondo la isla de Izaro, situada en el centro de la desembocadura de la ría de Mundaka.

Tras la parada, seguimos la señal de la antena de televisión. La carretera se estrecha, aunque el paso de vehículos es mínimo. Tras unos metros cogemos el desvío de la derecha, hacia Atxurra. Después de ese cruce la pendiente aumenta por encima del 6%, con alguna rampa que al 13%. Un último esfuerzo y vemos frente a nosotros la gran antena de comunicaciones. Los últimos 700 metros son los más complicados. Tendremos que superar dos cerradas curvas de herradura, desde donde se pueden observar los montes vizcaínos y el mar Cantábrico al fondo. Tras tomar las fotografías de rigor es el momento de descender hacia Mungia, aunque con mucha precaución al bajar el puerto