Once planes para los que se quedan por Semana Santa

Vas a caminar junto al agua, sobre pasarelas de madera en ocasiones, con cascadas que ponen sonido al ambiente, dentro de preciosos parajes húmedos. Entre hayedos y bosques, pasos angostos y tranquilidad. Durante 14 kilómetros (existe la opción de hacer solo la mitad). Unas 4 horas. Cubriendo parte del recorrido peregrino por el Camino Lebaniego. Para emprenderla, conduce hasta las proximidades de la desembocadura del río Nansa, a la pequeña localidad de Muñorrodero, que pertenece al ayuntamiento de Val de San Vicente. A diez kilómetros de San Vicente de la Barquera.

Cruza el pueblo hasta ver la iglesia, aproximadamente 600 metros después aguarda un desvío a la derecha que conecta con el cementerio. Deja el vehículo por allí para entrar en la antigua ruta de los pescadores que acudían al lugar con la idea de prender truchas y salmones. Llegarás hasta Cades sin perderte, la senda está bien señalizada. O solo hasta la central hidroeléctrica de Trascudia en Caminajes, cubriendo en este caso 7 kilómetros, con salto de agua incluido, por un tramo más sencillo para los peques. Eso sí, si regresas ya perderás la zona más agreste, y contemplar en Cades una ferrería rehabilitada. Tampoco podrás desviarte hacia el Mirador del poeta.

En ambos casos, cruzarás de una orilla a otra de la corriente por las conexiones que antaño usaban con su objetivo claro aquellos buscadores de peces. El tuyo es disfrutar, desconectar del asfalto, conectar con el verde de la naturaleza y el azul del agua. Entre principio y final, origen y destino, se hallan curiosos rincones como la Cueva El Rejo, que los murciélagos usan con 'resort', y a la que no podrás acceder, por cierto, pues se encuentra cerrada para proteger a sus más de 500 vampíricos moradores, de seis especies distintas.

Bilbao volverá a animar la Semana Santa con su conocido Basque Fest, la gran fiesta de la cultura vasca que celebra su undécima edición y que se ha convertido en una tradición por estas fechas. La capital vizcaína acogerá así hasta el domingo 175 actividades en una treintena de espacios. Los conciertos, las pruebas de herri kirolak, los talleres gastronómicos y las sesiones de cine protagonizan un programa con el que el Consistorio quiere aunar «tradición con modernidad» y animar a sus vecinos a «redescubrir su propia ciudad». Además, servirá para que la oleada de turistas que se espera se zambulla en la cultura vasca.

El plato fuerte volverá a estar en El Arenal, que se convertirá en un gran espacio gourmet destinado a la promoción de productos locales. Una carpa de 1.500 metros cuadrados acercará a Bilbao la gastronomía de diez comarcas turísticas vascas. Quienes se acerquen podrán degustar quesos Idiazabal, pimientos de Ezpeleta o vino de La Rioja Alavesa. Entre catas y talleres son más de 1.000 las plazas que hay disponibles.

El renovado Bosque de Oma, situado en una parcela anexa del original, abrió sus puertas el pasado octubre. La nueva ubicación de la obra de Agustín Ibarrola permite redescubrir una obra de arte que ha trascendido las fronteras vascas y se ha convertido en uno de los iconos culturales de Bizkaia. Pese al cambio de lugar continúa manteniendo el mismo espíritu mágco que del que se podía disfrutar hace unos años y quedó anticuado por el mal estado de los árboles. Es precisamente este motivo, y por el consiguiente aumento de turistas que se esperan por estas fechas, el que ha llevado a la Diputación a poner en marcha un servicio de lanzadera gratuito desde Gernika hasta el parking de Santimamiñe con autobuses cada hora entre las 9.000 y las 13.00.

Sin embargo, a diferencia de lo que ocurría antes, la reserva anticipada es obligatoria y debe realizarse desde la página web de la Diputación. El objetivo de esta iniciativa es asegurar una visita de calidad y, por el momento, hay entradas disponibles en la mayoría de franjas horarias. La entrada libre es gratuita y la guiada, ofertada los sábado a las 11.00 en castellano y a las 12.30 en euskera) cuesta 10 euros. Además, como novedad durante esta Semana Santa, a las puertas del entorno natural junto a un mapa del Bosque se entregará un cuaderno bitácora que recoge información sobre este espacio.

El museo del Txakoli de Bakio, también conocido como el Txakolingunea, amplía su horario por Semana Santa y abre también a la tarde. En este espacio el visitante podrá conocer, mediante audovisuales envolventes de gran formato, todos los secretos de este vino, desde su historia y su evolución hasta cómo se han transformado las bodellas con la llegada de las nuevas tecnologías. El centro, inaugurado hace ya más de una década, ofrece la oportunidad de comprobar que aunque el txakoli blanco es el más conocido, hay bodegas que elaboran rosado o tinto. Todas las visitas incluyen una cata y se recomienda reserva previa.

Piezas LEGO por todas partes. De todos los tamaños y colores. Y formando diseños inimaginables. Así es el Brick Fest Live, el evento más grande organizado por la marca danesa de juguetes que el BEC acoge desde hoy y hasta el domingo. Durante estos días, cientos de familias pueden acercarse hasta este recinto multiusos para disfrutar de creaciones alucinantes de todo el mundo hechas con estos ladrillos atemporales.

Los promotores del evento lo definen como «una montaña rusa de emociones» que se deriva de la posibilidad de sumergirse en un foso gigante con miles de ladrillos de colores o de construir autos LEGO. La entrada se realiza por franjas horarias es gratuita para los menores de cinco años. Aquellos con menos de 16, en cambio, deberán abonar 15,50 euros y a partir de los 17 el coste de la entrada asciende a los 22.

Las tradicionales subastas de pescado vuelven a Santurtzi, organizadas por el Itsas Museo de la localidad. El centro marítimo recupera en Semana Santa esta singular actividad que permite conocer el pasado de la localidad marinera con la que quiere mantener sus esencias. De esta manera, un grupo de actores encarnan a los arrantzales típicos de los años dorados del puerto para recrear así cómo era la venta ambulante.

Las visitas se realizan en el museo y sus alrededores tanto mañana como el sábado a las 12.30 y tienen un coste de 2 euros. Después del teatro, los asistentes podrán participar en su propia puja e intentar hacerse con los mejores bacalaos, sardinas y chipirones.

Vitoria vuelve a celebrar su tradicional Feria de Artesanía de Primavera. La Plaza de los Celedones de Oro acoge hasta el próximo 7 de abril un espacio que se ha convertido en un encuentro entre los trabajadores artesanos y sus clientes. Estos mostrarán sus habilidades manufactureras en áreas como la cerámica, la cosmética o la estampación botánica.Además, quienes asistan también podrán participar en distintas actividades y talleres. Hoy mismo a las 17.00 tendrá lugar una clase para aprender a hacer carteras con cuero, mañana a las 13.00 habrá cuentos infantiles y a la tarde un concierto del grupo 'Como tú quieras'. El domingo, la plaza acogerá un taller de talla de madera a partir de las 17.00.

Todas las personas que pasan por allí quieren atravesar el puente colgante que aparece en muchas fotos, un atractivo reclamo que pone la guinda a este perfecto recorrido. Su estructura metálica pende sobre la corriente, hace soñar a críos y no tan críos con aventuras a lo Indiana Jones a pequeña escala.

Cuenta la leyenda que el caserío que aguarda al completar el camino, en La Encontrada, funcionó antes como ferrería. Que fue también casa-torre y perteneció al linaje de los Gereña. Y allí moraban los señores del valle. Que al abrigo de sus muros se cobijó la princesa Blanca, hija de la reina de Navarra, mientras su padre, Juan 'El usurpador', apresaba a su hermano, el príncipe Carlos, legítimo heredero al trono. Que ella, afín a Juan, esperó allí paciente hasta que él acudió a buscarla y gritó aquello de: «¡Encontrada!». De ahí el nombre del lugar. Pero regresemos a la realidad.

El Baia surge en la parte alavesa de Gorbeia y acaba engordando el Ebro en Miranda. A su vez es nutrido por las aguas del Añana que riega Zuia, Pobes y Kuartango. La ruta, breve, suma 3,8 kilómetros ida y vuelta, una hora despacio. En Lukiano. Para acertar con el camino debes fijarte en una pequeña pista forestal junto a la iglesia de San Juan y la bolera. Recomiendan elegir como referencia la marquesina y la fuente al inicio del pueblo, en la calle San Juan. Coge la primera calle a mano derecha y el breve ascenso que deja el templo a la izquierda. La carretera sigue a la izquierda, pero tú deberás elegir la pista forestal de la derecha. Después, basta seguir recto. Ten en cuenta que no hay aparcamiento habilitado.

Puedes empezar la caminata desde cualquiera de las dos provincias, tú decides. Lo importante es tener en cuenta que la dificultad es moderada y cubre 10,4 kilómetros, más otros tantos de vuelta, es decir, cerca de 4 horas. Con ellos se dan la mano el Parque Natural de Valderejo en Álava y el Valle de Tobalina en Burgos, a través de un estrecho desfiladero con las montañas de Sierra Árcena vigilando.

La mejor forma de acceder desde Álava a Valderejo y el desfiladero del Purón, que vertebra el valle, la ofrece el municipio de Valdegovía. A partir de allí hay carretera provincial hasta Lalastra, inicio de la ruta. El aislado entorno que vas a contemplar, primer parque natural de la provincia, está habitado por bosques repletos de especies (108), de aves (sobre todo buitres leonados) que lo sobrevuelan. Por belleza, mantenida gracias a su difícil acceso, y de calma.

En él estalla con júbilo la biodiversidad. Puedes visitar la Casa del Parque para organizar la información. A partir de ahí, la mejor opción pasa por obedecer el sendero paralelo a la orilla. Desde la propia Casa del Parque o el aparcamiento situado cerca del pueblo abandonado de Ribera.

Contemplarás los acantilados calizos de la peña de Carrias, la garganta abierta por el cauce. Tilos, avellanos, hayas, tejos, acebos, enebros, sabinas… A tu encuentro saldrán cascadas. Emocionará ese desear juntarse que llama a las paredes enfrentadas, la atracción fatal que han sentido a lo largo del tiempo. Ya en Burgos llega el perfecto Espacio Natural de Montes Obarenes-San Zadornil. Y elementos patrimoniales que no dejan indiferente: eremitorio visigótico excavado en roca, monasterio del IX, puente romano en la calzada que comunicó entonces las actuales Briviesca y Orduña…

Al PR-GI 3005 se lo conoce también como la Senda secreta, nombre suficientemente atractivo para acercarse a comprobar la razón de que lo ostente. Nos gustan los misterios, desvelar verdades ocultas, por eso arrancamos hacia Oñati para, ya desde allí, cubrir un trayecto circular a pie de 7,2 kilómetros. Con desnivel medio de 320 metros. Que emprender desde Arantzazu. Durante 2 horas y 25 minutos. Para conocer parte de la comarca del Alto Deba, tesoros naturales entre bosques, campas y majadas. Con el cañón de Arantzazu como protagonista. Desde un punto de vista que no muestran las guías de turismo, de ahí lo de los secretos.

Entre los enigmas que acabarán descubiertos, tras superar cuestas y senderos, el denominado campo de fútbol de Iturrigorri, hondonada donde los franciscanos disputaban sus partidos. El bosque de idéntico apellido que, debido a su riqueza en biodiversidad, la Diputación Foral de Gipuzkoa utiliza para la investigación. La majada de Arriona, pequeña hondonada con preciosa panorámica de los hayedos, donde descubrir una piedra cenizal si observas con atención. Y la majada de Arriona, circular, en la que también destaca su piedra divisoria central. Más información... en la web:

www.gipuzkoanatura.eus.

Txotx. En plena temporada de sidra el Caserío Museo Igartuibeiti, ubicado en Ezkio, ofrece un programa especial durante la Semana Santa con el objetivo convertir este zumo de manzana en un plan familiar para todas las edades. De esta manera, el museo ofrece una visita lúdica por el caserío guiada con juegos infantiles. También incluye la ocasión de conocer la importancia de los alimentos con los que trabajan en el caserío gracias a la exposición 'El mundo pintado en cuatro sabores', que culmina con la degustación de un pintxo y una cata de sidra.La visita guiada por el caserío, con un coste de cuatro euros para los mayores de 12 y gratuita para los menores se podrá realizar mañana a las 11.00 en euskera y a las 12.30 en castellano. En cambio, la degustación de un pintxo y la sidran tendrá lugar el sábado, también con una sesión por idioma, y al precio de seis euros.