Motos acuáticas para cabalgar sobre las olas en la costa vasca

Cuatro son las opciones que te presentamos en estas líneas. La primera denominada Excursión Jaizkibel, que arranca en la bahía de Txingudi, desde cuyas aguas podrás observar los municipios de Hondarribia y Hendaya, asomados al mar, acostumbrados a los surcadores de oleaje. Desde allí el motorista ha de dirigirse hacia la isla de Amuitz, aunque antes de llegar visitará la playa de los Frailes. Las faldas del monte Jaizkibel vigilan el avance, proporcionando un toque de verde a la marinera estampa. Gracias a esta ruta observarás los acantilados de este promontorio montañoso hasta llegar a la cala de Biosnar. Tardarás en completar la ruta aproximadamente una hora.

La segunda propuesta incluye una excursión hasta Donostia tras pasar por la isla de Amuitz. Las faldas del monte Jaizkibel vuelven a convertirse en delicias paisajísticas hasta llegar a la bocana de Pasaia. Tendrás un instante para cobijarte en ella y observar el precioso pueblo costero repleto de casitas multicolor. Desde ahí, directos a Donostia, o casi, pues pasarás por la playa de La Zurriola. Ya en la bahía de la Concha, el piloto admirará de cerca el puerto de la capital guipuzcoana, sus playas con bañistas y paseantes, antes de bordear la isla de Santa Clara y poner rumbo a Hondarribia de nuevo. El viaje dura dos horas.

La tercera invitación navega hasta la localidad vascofrancesa de San Juan de Luz con paso previo por la playa de Hendaya hasta llegar a los peñones rocosos de Las Gemelas. De camino habrá tiempo de observar el Chateau D'Abbadie, edificio cuyas vistas preceden a los acantilados de la Cornise hasta llegar a San Juan de Luz. ¿Quién espera allí? La bahía de Cibure, con su exquisito puerto donde dormitan las embarcaciones. En este caso, se cumplirá una hora de paseo.

Por último, interesante también la ruta hacia Biarritz. Ya lo sabemos, Bahía de Txingudi primero y rodeo a Las Gemelas después. Camino por las Cornise hasta pasar frente a los espigones de San Juan de Luz. Superados estos, comienzan a aparecer las playas de la Cote Basque: Lafiitenia, Guethary, Bidart, Ilbarritz… Hasta llegar a Biarritz en una excursión de unas dos horas en la que uno se despeina con gusto, agitado por los saltos sobre el agua.