Paseos en Plentzia junto a la ría y el mar

La primera opción camina hacia Armintza por Ermuamendi, para regresar a través de Urizar y Berreaga. Pese a que empieza en zona urbana, la ría, la bahía y el paseo marítimo hasta la playa de Astondo adornan las vistas. Tocará después subir hacia la suave cima de Ermuamendi, aunque antes habrás disfrutado la blancura del Faro de Gorliz y el corte de tierra de los acantilados. Puedes desviarte un rato, descender a Azkorriaga si apetece. Parar a intuir el Cabo Billano. O meditar, si más, mientras contemplas lo que te ofrece el mundo. Alcanzada la cumbre de solo 292 metros, comienza el descenso hacia Armintza. Los eucaliptos invaden la zona. Desde allí habrá que tomar el GR 280 Uribe Kosta hasta el barrio de Berreaga. Senda y asfalto se intercalan. En Berreaga deja esa ruta y desciende hasta Gorliz por Saratxaga. Solo queda regresar al punto de partida. Total cubierto por las piernas, 24 kilómetros de dificultad moderada.

La siguiente opción es más sencilla y corta, solo 14,5 kilómetros. Parte del metro e imita el inicio de la ruta anterior, junto a la ría para atravesar después la Plaza del Astillero y el puerto de Plentzia hasta la playa. Los arenales de Gorliz y Astondo componen la siguiente foto. Al llegar al fondo, coge la vía de la derecha hacia la cuesta y, antes de empezarla, sigue el camino Kukulu, a la izquierda hacia el faro. De nuevo deslumbra su nívea imponencia. Desde este chivato para marinos elige el sendero de la derecha. Pasa junto al acceso al búnker. Sigue hasta la puerta que cierra una campa. Escoge la izquierda y asciende junto a la valla hasta el segundo paso-puerta, para que te reciban las encinas y una excepcional panorámica del Cantábrico. Un cruce indica más adelante 'Armintza' o 'Faro'. Elige esta última opción, hasta llegar a una carretera. Gira al barrio de Fano para descubrir sus caseríos. Accederás a otra puerta que evita escapar al ganado. Atraviesa la campa y desciende hacia Astondo para volver a Plentzia.

Son algo más de 22 kilómetros de dificultad moderada para recorrer un tramo del Camino de Santiago de la costa. El camino norte a nuestro alcance, disfrutando de vistas sobre el mar y apuntándose a la vida sana, al movimiento. Imposible perderse. Sal desde Plentzia para dirigirte hacia Gorliz. De nuevo subirás al Faro de Gorliz. Y al monte Ermua, protagonista de hoy. Pastos y naturaleza guardan tus espaldas hasta Armintza, ramas que estrechan el camino. Del pueblo toca ascender al Urizarmendi, solo 295 metros. Después bajar al barrio de Goieta, de Maruri. Subida, esta vez al Jata (600 m), pasando también por el Jata Txiki. Y descenso final a Bakio, donde puedes tomar el autobús de regreso.

Nos repetimos, es lo que tiene partir desde el mismo puesto de control, pero se trata de dar opciones. Salida de la estación del metro. Pasamos el puente y enfilamos hacia el frontón. Solo hay que seguir las señales blancas y rojas para llegar sin perderse hasta el maravilloso edificio. Pero vamos poco a poco. Atraviesa el parque. También la carretera hacia un cruce, punto en el que una señal indica hacia dónde continuar. La ría de Plentzia acompaña tu avance. De frente. Con la presa de Arbina, entre los destellos que ver. Hasta el castillo de Gatika, que nunca deja de impresionar gracias a sus formas fantasiosas. A su historia de origen medieval y su diseño neogótico. Sorprendente, como recién salido de un cuento.

Nueva propuesta, también desde la estación. Fácil, sobre un total de 14,5 kilómetros. Debes cruzar el puente, seguir hacia el este por Gandias, paralelo a la ría en dirección a Butrón. Atrás quedará una urbanización. Toma un sendero para comenzar la subida hacia Andraka. Llegado allí debes atravesar la BI-2120 con cuidado, y caminar dirección norte hacia Goikomendi hasta llegar a la BI-3151. Cruza de nuevo la carretera dirección Ermua. Al toparte con el caserío en Fagoatze, desciende hacia Astondo. Para disfrutar de nuevo de la playa, de la ría y el puerto, hasta alcanzar el principio de la ruta que se ha convertido ahora en su final.

La pasarela que arranca junto a la estación lleva al caminante en paralelo a la carretera de Barrika hasta la curva de Cantarrana. Cuando acaba el paseo, a la derecha, una reja cierra el camino, pero se puede bordear y seguir pista arriba hacia Barrika. Es un paseo apenas conocido, en leve pendiente, entre robles de gran porte que finaliza junto al asilo y el campo de fútbol. Desde allí, hacia abajo, llegaremos a la playa de Muriola y los impresionantes acantilados que dominan la bahía de Astondo.