Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
iratxe pañeda
Miércoles, 22 de enero 2020, 23:26
Sentados en un balconcito sobre el río Ter disfrutamos de una cerveza artesana; el sonido del agua convertirá el momento en un recuerdo placentero marcado por la poderosa imagen del puente de piedra, el símbolo de Camprodon. Este municipio de la provincia de Girona, el ... de mayor extensión del valle al que da su nombre y una de las puertas del Pirineo catalán, a media hora de Olot y de Ripoll, conquista al viajero: amantes de la música y del arte, esquiadores y montañeros o a quien solo busque tranquilidad. De hecho, su atractivo viene de lejos. Ya a mediados del siglo XIX la burguesía de Barcelona eligió Camprodon como lugar de veraneo. Así surgieron los paseos de la Font Nova y de Maristany, inspirado en el paseo de Gràcia de Barcelona, está flanqueado por hileras de árboles que parecen no tener fin y que continúan guardando los secretos de sus fincas: según cuentan, una iglesia románica San Esteban de Gormáz (Soria) fue desmontada piedra a piedra y reconstruida en el jardín de una de las villas.
Cómo llegar A 200 km de Lleida, 120 de Barcelona y 75 de Girona
Webs www.camprodon.cat
Hoy, el turismo de montaña y de nieve ha convertido Camprodon en un buen destino para cualquier época del año. Si conducimos hacia la cabecera del valle, dirección Setcases, llegaremos por una cómoda carretera hasta el Parque Natural de las Cabeceras del Ter y del Freser y la estación de esquí del Vallter 2000, en un circo origen glaciar y con alturas desde donde divisamos la bahía de Roses o el Cap de Creus.
Aquellos años de mediados del siglo XIX marcaron la villa no solo por la llegada de veraneantes, sino también por el nacimiento del compositor y pianista Isaac Albéniz, hijo de un funcionario vasco de Aduanas y una catalana. Aún se conserva su casa natal, frente al Ayuntamiento, un hermoso edificio en gótico civil. La Fundación y el Museo Isaac Albéniz organizan cada verano –y ya van 34 ediciones– un festival de música en el que tienen cabida figuras consolidadas y jóvenes talentos. La música tiene fechas señaladas en el calendario de Camprodon y cuenta con escenarios de excepción; no hay que extrañarse si visitamos, por ejemplo, la iglesia románica del antiguo monasterio de San Pedro, germen de los orígenes del pueblo, y en vez de una misa nos encontramos con un concierto de cámara.
Junto a San Pedro se sitúa la iglesia de Santa María (s. XI), que ha sufrido numerosas restauraciones tras padecer incendios y terremotos. Desde ella nos adentramos en el casco antiguo de Camprodon para descubrir bellos edificios, algunos con influencia modernista como Can Suris que reconoceremos por la cenefa vidriada de bolas verdes o el Hotel Camprodon, con su fachada de un intenso naranja. Pasaremos junto tiendas que nos tientan con embutidos, las especialidades de la comarca, y llegaremos a la antigua fábrica de galletas artesanales Birba, inaugurada en 1929. Aunque se elaboran desde 1883 siguen teniendo una reconocida fama en nuestros días.
Callejeando alcanzaremos el punto en el que el río Ter recibe las aguas del Ritort, flanqueado por coloridos edificios, y ante nuestros ojos se alzará el fotografiadísimo Pont Nou, y no es para menos. Construido en el siglo XIV, el paso del tiempo, las guerras y los terremotos han sido los responsables de sus modificaciones pero sus 20 metros de altura aún imponen. No hay que dejar cruzarlo para atravesar la entrada fortificada de la Puerta de Cerdeña y observar la Torre del Reloj unida a la vieja muralla del castillo de San Nicolás, del que por desgracia hoy nada queda.
El balconcito mencionado en el inicio del texto pertenece a Can Prodon, establecimiento donde, además de cervezas artesanas, no hay que dejar de probar su planxats (tostas). Y para entrar en calor una fría tarde de invierno, nada mejor que su delicioso chocolate. (Carrer Sant Roc, 7. 629742663). A dos minutos a pie río abajo, el El Pont 9 es un restaurante familiar que trabaja con productos del entorno para ofrecer un menú de temporada (26,95 €), otro degustación (55 €) y una carta basada en lo mejor de cada estación. (Camí Cerdanya, 1. 972740521. restaurantelpont9.com )
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.