Las diversas propuestas de un monte cotidiano

Monte

• Distancia 18 kilómetros

• Altitud máxima 978 metros

• Punto de salida Armentia

• Dificultad Media

Hay muchas maneras de acceder al Zaldiaran. Una de las más habituales es desde Berrostegieta, partiendo de una pista situada frente a un repetidor de radio. En esta ocasión lo haremos desde Armentia, una opción más cómoda para acercarse en coche y aparcar. Y el orden no altera el producto. Se puede hacer la circular en un sentido o en otro, al gusto del consumidor. Una vez superado el bosque de Armentia, cuando nos aproximamos al pueblo de Eskibel, debemos elegir la dirección. Vamos a subir primero al Zaldiaran: por un camino que sale a la izquierda y una senda señalizada que nos conduce al pico de San Kiliz y su inconfundible tamboril, donde podemos hacer una primera pausa para disfrutar de las vistas hacia los Montes de Vitoria. Ya está cerca la cumbre, coronada con una gran antena, aunque deberemos superar una zona boscosa con bastantes raíces que complican ligeramente el paso.

Comenzamos el descenso hacia Eskibel y debemos decidir si nos acercamos a la cima de Busto -ida y vuelta para retomar el camino, con una última cuesta de sudor obligatorio-, desviándonos después a la izquierda para visitar la antigua torre militar que domina el cerro de Eskibel, construida durante la tercera guerra carlista (1876-79) por las tropas liberales para asegurar las comunicaciones de Madrid con Vitoria. Fue utilizada como torre de señales y hoy sus vestigios sirven para hacer un último descanso y deleitarse con las vistas sobre la capital alavesa antes de emprender la bajada, un tanto incómoda en algún tramo, al bosque de Armentia.