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La mirada ·
El texto deberá tener los ingredientes necesarios para atrapar a quien lo lea desde la primera línea hasta el finalHay gente a la que le gustaría escribir una novela, un poema, algo, pero no sabe cómo empezar. Así que, por si alguien decide que 2023 es un año estupendo para ponerse a la tarea, aquí van algunas reflexiones y ejercicios sencillos que a mí ... me sirven desde que comencé a dar los primeros pasos en esto de la escritura, aunque no hay que olvidar nunca que la lectura es la gran maestra del escritor.
Bien, les diré que escribir tiene algo en común con hacer el Camino de Santiago. Para escribir, aunque suene a perogrullada, solo hace falta una cosa, escribir, y para hacer el Camino de Santiago basta con echar a andar, ya dice un proverbio chino: «La más larga caminata comienza con un paso».
Por eso, el primer ejercicio del nuevo escritor será comprometerse, pase lo que pase, a escribir todos los días un folio, nos apetezca o no, estemos flotando en el mundo mágico de la inspiración o nuestra sensibilidad en ese momento sea la de un paramecio despistado. Y es que la tarea de escribir, como muchas otras, se compone de un 90% de transpiración y un 10% de inspiración. Fíjense, si escribimos todos los días un folio, a final de año tendremos un libro de 365 páginas en el que podremos comprobar nuestros progresos.
El segundo ejercicio será elegir un tema, el que sea, podemos contar que nos ha salido un grano en la nariz, rescatar un recuerdo perdido, describir una silla y hablar de los culos que reposaron en su asiento, hasta confesar que queremos escribir y que no tenemos ni puñetera idea de sobre qué escribir, cualquier tema puede servir como entrenamiento en esta fase de iniciación.
Tercer ejercicio, aquí hay que armarse de valor, pegar una patada al vértigo que produce el folio en blanco o la pantalla vacía del ordenador y empezar a desarrollar el tema elegido. Una vez los deberes hechos, guardaremos el escrito de cada jornada y esperaremos al día siguiente para leerlo, se necesita una cierta distancia para valorar con serenidad lo que hemos escrito. Además, esa lectura, como aconseja Gustave Flaubert, la haremos en voz alta, porque, al escuchar el texto de viva voz, nos daremos cuenta enseguida de los posibles errores que hemos cometido, sobre todo en cuanto al ritmo y la puntuación.
Cuando consideremos superada la etapa de los ejercicios de calentamiento, pasaremos a escribir algo más serio. Yo les aconsejaría que comiencen por un relato que no sea muy largo para no agobiarse, pero teniendo siempre claros dos objetivos que no hay que olvidar.
El primer objetivo dice que el texto debe transmitir exactamente lo que queremos transmitir y el segundo nos recuerda que el texto deberá tener los ingredientes necesarios para que quien lo lea se sienta atrapado desde la primera línea y siga leyendo hasta conocer el final.
Y ahora ya llega el momento de que alguien lea lo que hemos escrito y nos dé su opinión. Advierto, como todo aquel que escribe, lo quiera o no, se escribe, lanzar un escrito a la plaza pública es exponerse a las opiniones de los demás y habrá muchas que no nos gusten lo que se dice nada de nada. Además, solemos tener la tendencia de sentir el rechazo de nuestra obra como un rechazo personal y podemos acabar llorando por los rincones y dándonos mucha pena.
Acuérdense, nuestra valía personal no tiene nada que ver con que guste o deje de gustar lo que escribimos. Aunque el mundo nos admire por nuestros escritos, podemos ser unos mierdecillas como personas, las dos cosas no son incompatibles. Pero también quiero que sepan que, más allá de las dificultades que encontremos en el camino, escribir es una actividad apasionante. Mientras buceamos en la historia que estamos escribiendo, habitamos en otra dimensión en la que nada ni nadie nos puede hacer daño, nos vivimos por dentro con paz y sin sobresaltos, nos soñamos distintos, vivimos muchas vidas. En definitiva, se puede decir que somos felices.
Anímense, pues, merece la pena, 2023 es un año estupendo para que quien tenga ese gusanillo se lance a escribir y disfrute con la aventura.
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