La escarabaja Gregoria Samsa
La mirada ·
'La metamorfosis' de Kafka habla de la soledad de hombres, mujeres y niños a los que el poder convierte en pobres bichosSecciones
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'La metamorfosis' de Kafka habla de la soledad de hombres, mujeres y niños a los que el poder convierte en pobres bichosEn 1912, el autor checo Franz Kafka escribió a los 29 años 'Die Verwandlung', 'La metamorfosis', (título original en alemán, lengua en la que escribía Kafka), que se publicó en octubre de 1915. Kafka moriría a los 40 años por causa de la tuberculosis el ... 3 de junio de 1924 en el sanatorio Hoffmann de Kierling, Klosterneuburg, Austria.
'Die Verwandlung', 'La metamorfosis', es una novela corta, entre 60 y 70 páginas, aunque es el relato más largo escrito por el autor. Sin embargo, son pocas las novelas tan abiertas, con la posibilidad de tantos significados e interpretaciones. El argumento, conocido por todos, nos cuenta que Gregorio Samsa, el protagonista, se despierta una mañana convertido en escarabajo.
Al principio nos parece una fábula tan absurda que nos engancha por rara, queremos ver cómo se resuelve semejante tontería, queremos saber cómo acaba. Y los lectores seguimos leyendo con interés, aunque ya un tanto inquietos porque, a medida que vamos leyendo, hay una vocecita machacona susurrándonos que quizás no estemos tan lejos de despertarnos un día meneando muchas patitas.
Y es que, poco a poco, hemos empezado a sentir un latigazo de desasosiego porque comenzamos a intuir cosas que no nos gustan nada. La historia ahora pensamos que no es tan absurda como creíamos al principio, nos habla de algo que hemos vivido alguna vez en nuestras propias carnes, nos habla de la impotencia frente a una realidad que nos atropella, de sometimiento al poder, sea el que sea, y, de pronto, la confusión que sentíamos al principio se empieza a transformar en horror y compasión.
Por fin, cuando terminemos de leer la historia y cerremos el libro, diremos para tranquilizarnos que no hemos entendido nada, pero algo hemos debido de entender porque nos quedaremos tristes. Se sorprenderán si les digo que algunos encuentran pasajes de humor en esta fábula. Y les voy a ser sincera: no es mi caso, yo soy incapaz de apreciar rasgos de humor en el relato, sino todo lo contrario; siempre que releo la novela me convierto sin remedio en Gregoria Samsa y me dan unas ganas terribles de llorar por mí y por todos los escarabajos del mundo, que somos la mayoría.
Ahora bien, está claro que la historia tiene más de un significado, quizás tantos como lectores. Y surge entonces un abanico de posibilidades. Sabemos por la 'Carta al padre' que la relación de Kafka con su progenitor era muy difícil. Ya siendo un niño, cuando iban juntos a nadar, la envergadura física del padre provocaba un complejo de inferioridad en el hijo, incluso en esa carta se disculpa por no haber llegado a ser lo que su padre esperaba de él.
Ese sentimiento de inferioridad lo volvemos a encontrar en 'La metamorfosis' cuando el padre entra en la habitación de Gregorio, ya convertido en escarabajo, y él, en su condición de bicho pequeño y repugnante, solo puede ver unos grandes zapatos de suela gruesa que le pueden aplastar al pisarle descuidadamente cuando se ponga a andar.
La soledad de hombres y mujeres también está en esas 70 páginas de Kafka, llega poderosa, se nos pega al cuerpo y nos pringa el alma. La soledad está representada en la indiferencia de la familia de Gregorio ante su dolorosa situación. El relato representa a todos los hombres, mujeres y niños a los que el poder, el poder político, el del jefecillo o jefa de turno, el poder de andar por casa, en definitiva, el poder sea el que sea, les convierte en pobres escarabajos indefensos.
Quizás una interpretación que constituye el corazón de la novela es que, al final, todos somos bichos a los que se nos puede matar, pisar, bombardear según la voluntad del más fuerte. De eso hoy sabemos mucho. Las guerras nos convierten en escarabajos que corren desesperados bajo los escombros intentando salvar la vida. Gaza es un ejemplo. Y hay muchos más casos que habitan cerca de nosotros, mujeres, niños y emigrantes maltratados o muertos, trabajadores machacados por sus jefes o por sus compañeros; gentes y gentes a los que el poder ha convertido en insectos.
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