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Cuestión de legitimidad

Cuestión de legitimidad

Un Gobierno o, peor aún, un partido se cree habilitado para hacer mercancía política de los derechos de todos, para negociar el Estado de Derecho

Sábado, 28 de octubre 2023, 00:03

La negociación en curso para que Pedro Sánchez alcance los votos necesarios no se para ante nada. Ese pacto se está construyendo sobre dos pilares herrumbrosos que por sí mismos constituyen una fuente de toxicidad para el sistema democrático. El primero de estos pilares es ... la banalización del mal, lo que en lenguaje más llevadero se suele llamar al blanqueamiento de Bildu-Sortu y a la normalización de su presencia en la política institucional desde el privilegio de no condenar la violencia real ejercida por ETA. Ni el ataque sin condena a la tumba de Fernando Buesa, ni las sólidas informaciones periodísticas que rescatan la activa militancia terrorista de Arnaldo Otegi hacen mella moral en los negociadores de la investidura. Bien al contrario, de nuevo una personalidad del Partido Socialista como la portavoz en el Ayuntamiento de Madrid y exministra Reyes Maroto entona un canto a la «conciencia social» de Bildu alegando que los acuerdos con este partido mejoran la vida de los españoles. Unir en la misma afirmación 'Bildu' y 'mejora de la vida de los españoles' es un sarcasmo hiriente que solo se puede explicar por el nivel de banalización que ha alcanzado el mal inferido por la violencia sobre toda la sociedad española.

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