Borrar
Parque nacional del Serengueti (Kenia). ANTONY NJUGUNA
Serengueti

Serengueti

El candelabro ·

Jueves, 25 de abril 2019, 00:26

Basta con ver lo que ocurre en el Serengueti para dar gracias a la vida por no haber nacido babuino. O mangosta. O avestruz. Los animales salvajes que habitan ese legendario parque africano pasan unas fatiguitas tremendas para llevarse algo a la boca y no ... ser ellos (o sus crías) el menú del día de otra especie con más hambre o con más dientes. Ni siquiera ser un gran felino te garantiza una existencia apacible. Ahí está la madre soltera leona, repudiada por su clan por haber mantenido relaciones con un foráneo y obligada a vagar a la desesperada por la inmensa sabana en busca de alimento para ella y para sus juguetones e inconscientes cachorros, que no paran de ponerse en peligro. A esa leona solitaria y carente de experiencia lo mismo la embiste un jabalí que un empecinado ñu o le roba la pieza recién cazada una jauría de hienas... Eso cuando no la persigue un león de su manada, lleno de celos y resentimiento, dispuesto a zamparse a sus crías.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo Serengueti