Hormigas de la patria

Así las cosas, el primer cara a cara lo han tenido Sánchez y Feijóo por separado en 'El hormiguero'. Cuarenta y cinco años después, la democracia española ha conseguido que dos hormigas de felpa arbitren el debate político en la víspera electoral. Son 'Trancas' y 'Barrancas' las hormigas de la patria y frente a ellas los candidatos dieron lo mejor de sí. El presidente demostró su habilidad para neutralizar cada pregunta sustituyéndola por otra para la que sí tiene una larga tirada de argumentario. Y para hacerlo modulando la voz, como si fuese repentino el recitado. Feijóo demostró en cambio su habilidad para expresarse por mera aproximación, obligando a que el oyente olvide lo que dice para tratar de averiguar lo que intenta decir. Habla Feijóo cada vez más como Rajoy. Quizá la sede de Génova esté revestida con alguna especie de asbesto antisintáctico.

Dejando a un lado lo triste de que los líderes políticos no puedan hablar con naturalidad y cierta pasión de aquello a lo que dedican sus vidas, hay que recordar que ni las entrevistas ni los debates mueven votos, pero que conviene que los candidatos debatan y que las entrevistas las hagan periodistas y no muñecos. Curiosamente, en 'El hormiguero' Sánchez y Feijóo solo estuvieron realmente bien respondiendo a la misma pregunta. ¿Qué haría usted si su hijo aparece en casa con una pareja de Vox o de Podemos? Los dos vinieron a responder lo mismo como quien dice la mayor obviedad: «Pues qué vamos a hacer, sacarle una silla y algo para picar». Solo les faltó añadir enfadados que el país es una cosa muy distinta a lo que se les oye todo el día a los políticos en televisión.

El tercer informe del foro Zedarriak se ocupa del talento y señala entre otras cosas las dificultades de las universidades vascas para atraer estudiantes de otras comunidades y del extranjero. Es algo que hacen mejor en Navarra, La Rioja o Castilla y León. La situación preocupa en Zedarriak, foro de figuras del mundo empresarial que cree necesaria una mayor internacionalización de los centros educativos. Esperemos que sus opiniones generen esta vez debate y no furia gubernamental. Sin duda, suena bien lo de los estudiantes de fuera, pero no solo para aprovechar su talento. También para que nuestra sociedad envejecida aproveche su sangre. Y sus órganos, si me apuran. Eso sí, para internacionalizar la educación universitaria yo recomiendo resucitar antes la vida de las ciudades vascas. Incluso la vida diurna. Regrese el lector a sus veinte años y escoja mentalmente: un año en la universidad de Jena o uno en la de Tijuana.

A una mujer de Granada le han estafado 170.000 euros haciéndole creer que Brad Pitt se había enamorado de ella. Además de amor, Brad necesitaba pasta. Y la buscaba en Granada por no pedírsela a George Clooney. Explica el abogado de la mujer que los timadores son astutos y que a cualquiera puede pasarle. Pues una vez que te pasa y tienes que recurrir a un abogado por lo de la estafa, lo primero es pedirle que publique un comunicado de ruptura unilateral con Brad Pitt, deseándole lo mejor pero dejándole claro que ni siquiera como amigos.