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Blinken y Lavrov se vieron ayer en una reunión ministerial del G20 en Nueva Delhi. Fue el primer encuentro entre los máximos responsables de Exteriores de Rusia y Estados Unidos desde la invasión de Ucrania. La diplomacia es un juego sofisticado y el Kremlin puso ... a circular que fue el americano quien se acercó. Yo lo habría recreado un poco, las narraciones se fijan con detalles: «Nuestro Lavrov ni se había fijado en el pobre Blinken, ya que estaba ocupado con el reconocimiento facial de su móvil. Desde el último retoque estético, el teléfono le pregunta por qué tiene las plantas de los pies en los pómulos».
La conversación duró diez minutos y Blinken le dijo tres cosas a Lavrov. Que suelten a un estadounidense que tienen preso acusado de espionaje, que regresen al tratado de armas nucleares y que tengan claro que Estados Unidos seguirá apoyando a Ucrania. Lo que respondió Lavrov es un misterio. Ayer intenté buscar alguna noticia en 'Pravda' y lo más interesante que encontré sobre la guerra fue una predicción de la astróloga Lukashevich. Resulta que Plutón entra este mes en Acuario y eso no ocurría, casualidad, desde que Catalina la Grande se anexionó Crimea y media Ucrania.
Hay algo que no explican quienes insisten en que es dialogar, y no enviar tanques, el modo de parar la maldita guerra. ¿Cómo se dialoga con alguien que, como Lavrov, hace del cinismo una rutina insultante? En febrero del año pasado Blinken ya invitaba a Rusia a dialogar y media Europa se ofrecía a albergar el encuentro. Tras insistir en que era absurdo porque lo de la invasión de Ucrania era propaganda occidental, Lavrov anunció el lunes 21 que se reuniría con Blinken en Ginebra el jueves 24. Para hablar de paz. Y ese día Rusia invadió Ucrania. Dejando a un lado a los infalibles pescadores en río revuelto, asombra el optimismo de quienes confunden con razones los más bellos sentimientos. Recuerdan a aquel analista del Departamento de Estado al que Art Buchwald vio estudiando una emisión de radio vietnamita y encontrando una señal esperanzadora en el hecho de que el enemigo mencionase por primera vez algo tan tranquilizador como el mar. En la siguiente frase: «Los imperialistas norteamericanos serán arrojados al mar».
Árbitros
La Federación de Fútbol es un culebrón venezolano. Se vive allí un drama tan íntimo, la sensibilidad vibra tan a flor de piel, brotan de un modo tan conmovedor las emociones, que la Casa del Fútbol debería llamarse Casa del Suspiro. Y en lugar del nombre de Luis Aragonés, el salón de actos debería llevar el de Meryl Streep. Fue en ese salón donde vimos al presidente Rubiales retrotraerse a los episodios más duros de su infancia para explicar lo de los negocios con el jeque y con Piqué. Y allí vimos ayer a Medina Cantalejo, presidente del Comité Técnico de Árbitros, romper a llorar defendiendo la honra del colectivo ante el escándalo Negreira. «Yo soy nieto, hijo y padre de árbitros…», tremoló el viejo referí, victimizándose. Lo que no hizo fue dar explicaciones. Aunque el tema candente, por supuesto, es otro. ¿Cómo organizarán los Medina Cantalejo las pachangas familiares? Debe de ser un espectáculo, todos queriendo arbitrar.
'Dick Pics'
No enviar fotos no solicitadas de los propios genitales es una buena norma para andar por la vida. Si la foto de los genitales es solicitada, tampoco hay que enviarla. Aunque te la pida tu urólogo y sea una urgencia. Escribo urólogo porque son los hombres los que hacen estas cosas. Y me basta decir su nombre, Tío Berni, para recordar dónde pueden acabar las fotos más divertidas. En resumen, queridos niños: no hagáis en la Red lo que no haríais en la calle. Y no os encarguéis personalmente de la labor documental que os llevará a la cárcel.
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