Cumbres informales

España ·
El PSOE y el PP organizan en Toledo retiros estratégicos simultáneos

Pablo Martínez Zarracina

Lunes, 15 de enero 2024, 00:03

Tanto conflicto y la política española es una coreografía. Acabamos de verlo: a los dos grandes partidos les ha tocado fin de semana grupal, convivencial, ignaciano. Pedro Sánchez convocó a sus ministros en la finca de Quintos de Mora -donde Aznar no solo le señaló ... a Bush una montaña sino que se la explicó: «One mountain»- y Feijóo hizo lo propio con la dirección del PP en un cigarral de Toledo. Si el mensaje de ambas reuniones hacía referencia al equipo, la cohesión y la estrategia, su objetivo era más ambicioso y consistía en generar imágenes de los políticos cambiando sus uniformes por vaqueros, zapatillas, jerséis y plumíferos. Como hoy se reactivan las tertulias y se comentarán los estilismos, debo denunciar que no fueron plurinacionales. Una mínima sensibilidad hacia lo vasco habría bastado para que un ministro, o al menos un vicesecretario general, saliese a pisar césped embutido en la cantidad de ropa técnica de montaña que hace que un sherpa nepalí se te acerque en busca de un contrato.

«Dar impulso al proyecto político de los próximos cuatro años». Ese fue el objetivo del cónclave gubernamental. En el retiro del PP se leyeron informes y se desencadenaron tormentas de ideas. Quizá también se ensayó la prohibición de los móviles en Primaria porque Feijóo les quitó a los suyos el teléfono para que no se distrajesen.

Cabe suponer que en las casas rurales habría además ping pong, barbacoa, parchís, guitarras y pequeños actos delictivos a espaldas de los respectivos presidentes: Marlaska y Montero, los ministros veteranos, organizándole la novatada al ministro Cuerpo; González Pons liderando con Javier Arenas la escapada nocturna al pueblo más cercano… Pese a haberse reunido a escasa media hora de distancia, de lo que no hay noticia es de que las convivencias de los partidos coincidiesen, no sé, aprovisionándose en el Mercadona o en la finca en la que hicieron, ya sin fotos, la capea. Lástima. Al verse todos tan normales y tan 'cozy' con las camisas de leñador, imagínense que agarran y reactivan el abrazo constitucional.

Vitoria

Rápido y funesto

Las quedadas para quemar rueda en carreteras apartadas y polígonos industriales -combinaciones clandestinas de botellón y 'Fast and Furious'- vivieron en la pandemia una inesperada primavera que quedó documentada en vídeos que se multiplicaron por las redes. En ellos, entre acelerones, sustos y golpes de chapa, la evidencia de que entre tantos peligros un coche sin control podía irse contra los espectadores generaba una conclusión inmediata: «Cualquier día va a pasar una desgracia». El día fue el sábado y la desgracia ocurrió de madrugada en el polígono de Júndiz. Dos jóvenes murieron después de que un coche de alta gama chocase a gran velocidad contra el suyo. Hay un tercer chico muy grave. La Policía investiga lo ocurrido. El concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Vitoria lo situó desde el principio en una quedada de jóvenes «en busca de adrenalina». Ahora, mientras se acotan responsabilidades y se señalan otras carreteras que funcionan como circuitos, se conocen las vidas de los muchachos que han muerto demasiado pronto. En el reverso trágico de la juventud habita con frecuencia una triste paradoja: la adrenalina, en realidad, sirve para sobrevivir.