Emergencia migratoria

El aumento en un 82% de los inmigrantes irregulares que llegaron a España el pasado año -56.582, la mayor cifra de la UE tras Italia- ilustra sobre el impacto de un desafío global que sigue sin encontrar una respuesta adecuada. La situación es especialmente ... grave en Canarias, que recibió a casi 40.000 personas -un récord- y a donde en la última semana han arribado varios cientos más que huyen de la miseria, las guerras o la falta de libertades. Sus servicios de acogida están desbordados pese a la distribución parcial de los migrantes por otras comunidades. El alivio que ha supuesto el intenso control de la frontera por parte de Marruecos tras el giro español sobre el Sáhara se ha visto sepultado por la avalancha de cayucos procedentes de Senegal y otros países azotados por agudas crisis sociales y políticas. Nada indica un cambio a corto plazo de esa tendencia, lo que obliga a un esfuerzo de solidaridad interna en la Unión y a buscar acuerdos con las naciones de origen para mitigar en lo posible un fenómeno que no se resuelve solo con más seguridad, aunque sea necesaria, y que divide a Europa como ha demostrado la gestación del pacto migratorio, cuya eficacia está por probar.