Culturizar hasta tarde
Furgón de cola ·
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Furgón de cola ·
El lehendakari anuncia la ampliación del horario de la hostelería hasta medianocheSe esperaba el LABI de ayer por el lado del horario de los bares y el lehendakari anunció que la hostelería puede funcionar desde mañana hasta las doce de la noche, dejando de ser así el País Vasco una isla recatada en el mapa español. ... Nada más conocerse la noticia, yo sospecho que los vascos cesaron de atender al lehendakari y comenzaron a mandarse mensajitos exaltados. El país puede al fin hacer una de las cosas que sí se le dan bien: cenar fuera.
Cuando el lehendakari terminó una intervención en la que habló además de datos epidemiológicos, deporte al aire libre, transporte público o espacios expositivos, los periodistas le preguntaron por los bares. Conociendo al gremio, me extrañó que no utilizasen una entradilla apremiante: «Volviendo a lo trascendental…». Fue entonces cuando Urkullu pareció poner un gesto de estupefacción bajo la mascarilla y recordó que el LABI no había decidido la ampliación del horario de una actividad, sino de un montón de ellas entre las que también está la hostelería. Y entonces dijo que el nuevo horario permite por ejemplo «la ampliación de la oferta cultural».
A Urkullu le faltó dejar claro que, cuando habla de oferta cultural, no se refiere a la carta de vinos. Habría sido un modo de ejemplificar la extraña situación en la que se encuentra el Gobierno vasco: tras insistir durante semanas en que eran partidarios de la alarma y las restricciones, favorecen ahora la diversión como los demás, pero dando a entender que mantienen una especial seriedad. El resultado puede ser confuso. Ayer Urkullu dijo muy serio que él cree que llevaremos mascarilla durante mucho tiempo. Cinco minutos después, salió Fernando Simón calculando que igual la mascarilla ya no es tan obligatoria en julio. Todo apunta a que este barullo puede continuar porque se intuye que la política española inicia algo así como una carrera loca hacia las buenas noticias. Llegados a este punto, creo que nuestro deber como vascos es disimular. Si una noche de estas dos parroquianos terminan a tortas en una terraza, los testigos deberían decirle a la Ertzaintza que todo fue una discusión sobre pintura renacentista que se salió de madre. Así, si el atestado llega a Ajuria Enea, el lehendakari podrá pensar que efectivamente es mucha la pasión que despierta la cultura en el país.
Marruecos
El ministro de Exteriores marroquí aclaró ayer que el lío no es por Brahim Ghali, sino por el Sáhara, territorio que Marruecos compara con Cataluña para añadir, volviendo al líder del Polisario, que ellos en 2017 no recibieron a «un gran líder» del separatismo catalán. A eso respondió ayer Pedro Sánchez, que aquí sí saca el perfil bueno de estadista y, a poco que le aprieten en Colón, todavía invade el Rif y recupera el Protectorado. Además de mencionar al primo de la UE, Sánchez vino a preguntar si para Marruecos llenar el mar de críos es una acción diplomática. Eso estuvo bien, pero yo habría aprovechado el paralelismo con Cataluña para amenazar con poner a miles de grandes líderes separatistas catalanes en la frontera con Marruecos. «Son como 'djins', te vuelven loco», habría advertido con un ejemplo de ayer mismo: en los territorios ocupados de Cataluña, las juventudes separatistas de la CUP han pintado la tienda-chalé que la gran líder separatista Rahola tiene en el campo de refugiados de Cadaqués acusándola de sionista.
Asturias
Si aparece un oso, calma. Me encantan esos consejos. Los anoto todos mentalmente: «Ok, aparece un oso y lo neutralizo impresionándolo con mi tranquilidad». Lo hago porque vivo en una ciudad y no hay peligro por ese lado. Si apareciese un oso en la ciudad, la multitud se abalanzaría sobre él para hacerse selfis y el animal moriría aplastado y estupefacto. Otra cosa sería vivir en Cangas del Narcea. Allí sí puedes encontrarte con un oso. El domingo una mujer de setenta y cinco acabó con un zarpazo en la cara y la cadera rota. El episodio genera el clásico debate en el que antes o después alguien suelta que el animal peligroso es el hombre. En Francia ahora se quiere capturar a un oso famoso y conflictivo de los Pirineos para ponerle un localizador y hay polémica. Las asociaciones de «amigos del oso» se oponen a la captura porque no es un «oso problemático» aunque «puede haber tenido comportamientos atípicos en el pasado que ya se han corregido». Ese modo de pensar asombra. ¿Cómo alguien que dice amar a los animales no entiende qué es un animal? Dan ganas de preguntar si el oso del que hablan es un oso o un alumno de Bachillerato muy peludo.
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