Filtraciones y filtros

Ahora La Moncloa nos ahorra el trabajo, pues ayer envió a los medios de comunicación un correo con todas las respuestas a todas las peliagudas cuestiones que era preciso contemplar de cara al Consejo de Ministros. El 'argumentario', es decir, la lista de razonamientos, según la Real Academia, «para probar o demostrar una proposición o para convencer de lo que se afirma o se niega», cubría temas de candente, inflamable actualidad, y mostraba la ley de los partidos al desnudo: quien se mueve no sale en la foto, quien se sale del argumentario se sale de cuadro, quien piensa por sí mismo está fuera de lugar.

Era el documento un programa de instrucciones para personas bastante parecido a un conjunto de instrucciones para máquinas. Su forma: «Si el tema es (Ábalos, Aldama, Begoña Gómez, David Sánchez, Presupuestos...) la respuesta es (y aquí el correspondiente argumento o subconjunto de argumentos para cada caso)». Con esto, cualquier cosa que dijera la ministra portavoz ya estaba dicha de antemano. En realidad la filtración involuntaria no aportaba nada nuevo, pues todas esas explicaciones, acusaciones y teorías llevan ya un tiempo circulando por ahí y han sonado alto y claro en el último congreso del partido. Lo que hace el documento es mostrar descarnadamente lo que sabíamos. Es la prueba, la evidencia. Es el consabido método fijado en una instantánea atroz que reduce la actividad parlamentaria y el debate político a un trabajo mecánico, sin creatividad ni grandeza, donde lo único que pueden poner los actores es su pasión sectaria, su decidida voluntad de permanecer en las filas, luchando por el bien común del grupo que comparte y reparte poder.

Nunca ha sido más fácil filtrar información y nunca ha sido más fácil difundirla involuntariamente. Todo el episodio Alberto González Amador-Álvaro García Ortiz-Pilar Sánchez Acera-Juan Lobato se ha hecho con filtraciones y contrafiltraciones. La información ocupa poco lugar, se transmite instantáneamente, se almacena en diferentes dispositivos. Usas el comando inadecuado, no revisas la configuración, le das al botón equivocado y el error es irreparable.