Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Tengo la suerte de entrenar a un equipo de fútbol que compite en un torneo que se celebra un sábado al mes, por la noche. Con tentempiés, música y fútbol. Y ya solo el coste de oportunidad que tiene, al celebrarse en una franja horaria ... tan proclive a actividades más lúdicas pero menos edificantes, merece la pena. Vamos, que es una gozada que estén haciendo deporte en lugar de mamarse como mirlos.
Y es que hoy en día los jóvenes (todos) nadamos en un mar de ofertas de estímulo inmediato. Básicamente porque lo más fácil de vender es lo que menos cuesta consumir. Pero quien se deja llevar por los placeres cómodos no ejercita lo más importante que hay: la voluntad. Cualidad sin la cual -decían los filósofos griegos- seremos esclavos de las apetencias.
Mis amigos de Onza produjeron un documental, 'Young Addictions', sobre las nuevas adicciones a los juegos 'online' o la pornografía. Cosas que me dan pavor. Porque la adicción a lo primero fabrica retraídos sin confianza, y la adicción a lo segundo provoca una visión deformada de la sexualidad y de las personas, sin basarse en el respeto máximo que nos debemos.
Pero no podemos incurrir en la hipocresía de desdeñar la valía de nuestros jóvenes. «Los jóvenes de hoy no tienen control. Han perdido el respeto y no saben lo que es la educación». Esa frase, que parece pronunciada por cualquier gurú actual, la dijo Aristóteles hace 2.300 años. El problema siempre ha sido el mismo. Las personas más jóvenes están a medio formar (y los adultos, a veces, medio deformados). Y si les ofrecemos lo fácil y apetecible por todas las vías estimulantes posibles, sencillamente… no escogerán otra cosa. Así que qué importante es ofrecerles buenas alternativas.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.