El Mirandés reparte el lanzamiento de penaltis

El técnico, Alessio Lisci, no quiere que en el equipo sólo exista un lanzador lo que, entre otras cuestiones, siempre da ventaja al portero rival que, de esta forma, puede estudiar y analizar por dónde puede disparar el encargado de hacerlo.

Así quedó claro en el estadio Carlos Belmonte frente al Albacete, cuando Mathis Lachuer fue quien disparó desde los once metros para, con su pierna izquierda, establecer el 1-1 justo antes del descanso.

No es la primera vez que lanza un penalti porque en el duelo que se jugó en Anduva frente al Sporting también hizo de esta manera el gol de los rojillos en aquel empate a una diana contra los gijoneses.

Es el tercer miembro de la plantilla que llega a los dos tantos con tiros a balón parado desde dentro del área. Con anterioridad lograron que subieran al electrónico Panichelli, con otros dos, así como Izeta, también con dos dianas.

Seis goles en los ocho penaltis con los que ha contado el Mirandés a su favor esta campaña se han registrado por el momento en las 33 jornadas ya transcurridas. «Hay varios jugadores que pueden tirar penaltis, dos o tres, y, a partir de ahí, no me parece mal que se cambie de lanzador porque el portero te conoce y el porcentaje puede ser ya menor para acertar», revela el preparador rojillo acerca de esta 'suerte' del fútbol.

«Hay dos o tres lanzadores y en el campo han decidido cambiar. Si yo intervengo, generamos una discusión antes de un penalti y eso es lo peor», manifestó Lisci cuando en su día se le preguntó por la decisión acerca de quién es el responsable de tirar o de ordenar el lanzamiento de los penaltis.

Sea como fuere, el bloque jabato ha sumado el 13% de sus 45 goles con este tipo de disparos después de fallar en dos ocasiones. Izeta y Panichelli marraron uno cada uno. En este capítulo es el centrocampista francés el que tiene el 100% de acierto al convertir los dos tiros que ha efectuado este curso desde los once metros.