Lisci dirige al Mirandés con muletas y el pie escayolado en una sesión sin Tachi en el grupo

Dando instrucciones sobre el terreno de juego se encontraba Alessio Lisci, pero lo hizo apoyado, al principio, en dos muletas porque tiene el pie izquierdo escayolado. Un hecho que fue observado por los presentes, mucho de ellos aficionados que siguen de manera habitual los ensayos del primer equipo.

El entrenador del Mirandés sufrió un percance después del encuentro ante el Zaragoza en un dedo, motivo por el cual dirigió a los suyos de esa guisa. Tampoco puede estar mucho tiempo de pie, así que vio las evoluciones de sus muchachos sentado en unas sillas habilitadas a tal efecto y, posteriormente, en el vehículo utilizado para mantenimiento, desde donde siguió la segunda mitad de la práctica, los minipartidillos en espacios reducidos y demás ejercicios.

Al técnico rojillo se le había hinchado previamente el pie, lo que derivó en un edema y fisura en un dedo. No parece que se trate de una fractura como tal, aunque en los reconocimientos que deberá pasar estos próximos días podrá despejar cualquier duda.

Sea como fuere, es una prueba más del compromiso que mantienen esta plantilla y cuerpo técnico con el club. El romano quiso estar presente y dar las correspondientes indicaciones en primera persona a pesar de la dolencia que arrastra estos días, pero que no le ha impedido estar al pie del cañón y continuar con la preparación del equipo en la recta decisiva de la temporada.

Está en la enfermería, pero en su caso puede desarrollar su trabajo, aunque lo tenga que hacer a una mayor distancia, más sentado que de pie, de como sigue a los suyos habitualmente.

Quien se encuentra, asimismo, 'entre algodones' es Tachi. El jugador rojillo sintió molestias en la segunda mitad del partido ante el Zaragoza. Con anterioridad, meses antes, había arrastrado problemas en la espalda y cuando se retiró lo hizo con visibles muestras de dolor tras ser preguntado por el propio Lisci sobre su estado.

El defensa central sigue un plan de trabajo diferenciado del resto durante esta semana –también lo ha hecho en ocasiones precedentes–, si bien no está descartado para ser de la partida ante el Deportivo de La Coruña este próximo domingo.

La experiencia y veteranía del de Fuenlabrada (a pesar de que 'sólo' tiene 27 años) es vital –ya lo fue el curso pasado– en un equipo de las características del Mirandés. Como no es la primera vez que sigue un programa específico para superar molestias todo apunta a que según vaya transcurriendo la semana se irá incorporando al grupo al objeto de no perderse el duelo frente a los gallegos.

Además, cabe recordar que Juan Gutiérrez es baja para este compromiso al cumplir el segundo ciclo de amonestaciones, por lo que se intentará que el madrileño pueda entrar al menos en la convocatoria de la jornada 35 para no perder a un segundo defensa central.

Mientras tanto, el resto del plantel continúa con unas sesiones que se desarrollan con normalidad –al margen de lo ya apuntado– y con las ganas por parte de todos los jugadores de volver a la senda de los triunfos después de haber cosechado dos derrotas consecutivas en otros tantos encuentros a domicilio.