22 personas logran dejar la calle este año gracias al respaldo de Cárita

En esta ocasión, 10 están vinculadas a la Unidad de Mínima Exigencia (UME), el primer escalón en el proceso para abandonar la calle y empezar a avanzar en la recuperación de hábitos sociales y de convivencia; a las que ha que sumar 8 varones más que han encontrado un hogar en la residencia y otros 4 que están en el piso tutelado. Y que, además, han conseguido un empleo. Al menos 4 han conseguido trabajos de larga duración y 7 más contrataciones esporádicas pero que ayudan en su proceso de reintegración en la sociedad.

Pero son muchos más los ciudadanos que están 'Fuera de Cobertura', tal y como reza el lema elegido este año por Cáritas para llamar la atención sobre el drama social que implica estar en la calle, coincidiendo con la conmemoración el 30 de octubre del Día de las Personas sin Hogar. Hasta la fecha, han sido 222 los transeúntes que han pasado por el albergue de Las Californias.

Un colectivo en el que son mayoría los españoles, hasta un 65%, de mediana edad, entre los 40 y 60 años y, un volumen importante del total, viejos conocidos del sistema de atención de la ciudad. Si bien, desde la entidad reconocen que desde verano han notado un incremento de extranjeros procedentes de otros países de Europa, principalmente Francia.

Aunque, de momento, creen que la actual situación de alza de precios y del coste de factura de suministros es algo que no se ha dejado notar entre este colectivo. Lo que sí están observando es la presencia de un mayor porcentaje de gente joven y con alguna enfermedad mental, sobre todo por policonsumos de drogas, en los que se han iniciado a edades muy tempranas.

Y es un perfil de transeúnte para el que «no hay recursos específicos» en la red asistencial tradicional. La atención a esta patología «esta muy mal». Hay que tener en cuenta que, además, se tratar de gente que está de paso en muchas ocasiones por la ciudad.

Entre los recursos temporales con que cuenta Miranda, ya está disponible el centro de día de la calle Álava, que abrió sus puertas hace una semana, el lunes 17 y las mantendrá así hasta finales de abril, durante el periodo de invierno. Lo hará gracias al apoyo de los voluntarios. 23 personas están vinculadas a ese espacio y 3 de ellas de reciente incorporación. Han respondido a la llamada que tras el verano realizó el colectivo para incorporar más personal dispuesto e echar una mano. Si bien, reconocen que les gustaría poder contar con 3 o 4 más.

Hay que tener en cuenta que, que en ese ejercicio, por sus instalaciones han pasado 157 usuarios (evidentemente, la gran mayoría lo hizo entre enero a abril). Además, en el comedor se han repartido 2.200 menús en cada uno de los turnos: desayuno, comida y cena.

Ahora mismo, Cáritas sigue a la espera de que se incorpore al servicio asistencial el albergue para mujeres construido por el Ayuntamiento y que está pendiente desde hace más de año y medio de que se ejecuten las aceras perimetrales; además de la realización de obras de mejora en la UME, para actualizar las instalaciones e incorporar calefacción.