El riesgo puede ser mínimo, atendiendo al protocolo de valoración policial para prevenir la violencia machista, pero ser percibido como 'extremo' por una víctima de malos tratos. Y es que el miedo es 'libre'. Lo sabe muy bien la agente de la Policía Local de ... Miranda encargada en la ciudad de brindar apoyo y seguridad a un buen número de mujeres que figuran en el Sistema Integral de Violencia de Género (VioGen). Concretamente, de las que su situación ha sido catalogada en los niveles de riesgo bajo y no apreciado.
Publicidad
Pero «todo es relativo», porque hay quien aunque apenas tenga riesgo lo vive con mucha angustia y temor. «Lo perciben así, aunque sea una sensación más que algo real. Por eso intento estar muy pendiente. Es algo que agradecen muchísimo», reconocía la agente; que cuenta con una larga experiencia, además de formación en la materia, porque aunque sólo lleva un año vinculada a VioGen hace 14 que es responsable de la materia en la Policía Local.
Ahora mismo mantiene contacto con 34 de las 99 que conforman ese listado con menos riesgo, pero antes de final de año trabajará con unas 15 más. Alcanzará así el objetivo de prestar apoyo a la mitad del grupo con menos peligro, tal y como acordaron hace un año las tres poblaciones de la provincia con más de 20.000 habitantes con la Subdelegación del Gobierno. Del resto, se ocupa la Policía Nacional. Ahora mismo, en el caso de Miranda, además de ser el 'salvavidas' de parte de las que tiene valorado un riesgo más bajo, también protegen a una mujer que se encuentra en riesgo alto y 9, en medio.
Pero la red, al menos en este caso, es mucho más amplia. La agente local vinculada a VioGen tiene su lugar de trabajo en las dependencias de Servicios Sociales, pared con pared con trabajadoras sociales, psicólogos... con los que poder contar de manera inmediata en el caso de necesitar coordinar algún apoyo más para una víctima. «Se busca dar una ayuda muy global», incidió.
Publicidad
Y en cualquier momento. Su disponibilidad es total para las mujeres asignadas a través de VioGen, las 24 horas del día o, incluso, en vacaciones. No se separa del teléfono. «Pero cuando te llaman, solucionas lo que te plantean y se quedan más tranquillas... compensa. Merece la pena».
Lo normal es que las citas sean programadas, queden, hablen, se llamen o, incluso, se pase por su domicilio. La frecuencia con la que lo hace depende de su propia valoración, de cómo las note. Con algunas se ve cada mes y medio y con otras habla cada tres días. No hay dos casos iguales. «Me van contando y se van abriendo... Hay situaciones muy duras», valoró; al tiempo que reconocía que, a veces, también resulta difícil comprender por qué no han sido capaces de salir antes de esa situación. «Pero es verdad que no es tan fácil, si no todas lo harían».
Publicidad
Por eso, sin duda, lo más reconfortante es, además del agradecimiento por el apoyo y por escucharlas, ver cómo van ganando confianza en ellas mismas y se muestran más optimistas y seguras. Todas, independientemente de la edad, de la situación económica, el entorno o la formación; porque el perfil de las víctimas es de lo más heterogéneo (al igual que el de los maltratadores); salvo por el hecho de que todas ellas tienen una orden de protección en vigor. «En este tema nada es blanco o negro, existen unos matices de grises que lo hacen complicadísimo», recalcó.
Sobre lo que no puede caber ninguna duda, tal y como destacó Begoña Fernández, responsable de la Unidad Contra la Violencia Sobre la Mujer de la Subdelegación, es de que «la violencia es cosa de todos y de todas. Hay que luchar desde todas las administraciones para que la cercanía a las víctimas sea cada vez mayor De esta forma, trabajando en red y en coordinación todos los implicados en esta lucha, ganamos todos; y las mujeres víctimas, más todavía». Se tienen en cuenta hasta 16 item a la hora de decidir qué nivel de riesgo se le asigna a cada mujer y, en función de ese riesgo, qué protección reciben.
Publicidad
Por otro, lado, durante la lectura ayer del manifiesto para la eliminación de la violencia, en una concentración con varias decenas de personas, Begoña González, concejala de Igualdad, destacó que «el 34,2% de las mujeres han sufrido violencia por parte de sus parejas o exparejas. El 47,2% no han denunciado ni han utilizado los servicios públicos de ayuda».
Más numerosa fue la convocada por el grupo feminista Mujeres en la Calle por la tarde en la La Estación, donde tuvieron un recuerdo muy visible para todas las asesinadas a lo largo de este año.
mujeres con riesgo bajo y no apreciado, pero con orden de protección, tienen asignada una Policía Local como apoyo.
Miranda es la que más ha avanzado para llegar a atender a la mitad de las que víctimas que figuran en el sistema VioGen con riesgo bajo o no apreciado, asumiendo seguimiento y protección. Aranda ha asumido 5 de 101 y Burgos, 23 de 235. «La implicación de Miranda es algo destacable», Fernández, responsable de la Unidad Contra la Violencia Sobre la Mujer de la Subdelegación.
El riesgo extremo se revalúa cada 24 horas y la atención policial es permanente; el alto, se valora cada 72 horas; el medio cada 15 días, el bajo una vez al mes y el no apreciado, cada 3.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.