«Funciona todo muy lento, si tienes una urgencia solo libras si surge un hueco»

El comentario es corriente entre los usuarios que guardan fila respetuosamente para ser atendidos: «El SAC funciona muy lento y no creo que sea sólo culpa de las personas que nos atienden en el mostrador. Son muy pocas para atender las consultas y gestiones de toda la ciudad. Antes acudía a la oficina del Centro Cívico, que me pilla más cerca de casa, pero la cerraron hace años y ahora todo el mundo ha vuelto aquí. Yo creo que falta personal y otro punto de atención para que se distribuya la gente. Además, ahora hace falta cita previa y creo que se retrasa todo todavía más», asevera José Luis Márquez.

El malestar no es exclusivo de la ineludible cita previa, las colas y la lentitud en la atención por la infradotación del servicio; sino que la línea telefónica también recibe su cupo de críticas. «Te recomiendan que llames por teléfono para que no se formen colas, para agilizar consultas que no requieren atención presencial o para pedir tu cita, cosa que pasa en muchos servicios actualmente; y luego hay veces que ni te cogen el teléfono. No sé si es porque no hay gente para todo o porque directamente pasan», lamenta cabreado Paco Sastre.

Todos los usuarios coinciden en que el sistema de cita previa por teléfono que es altamente disfuncional, puesto que tampoco permite la cancelación de las citas ya programada y, por lo tanto, genera citas fantasmas y alarga los plazos para obtener una. Usualmente, el usuario se harta y acude al SAC, lo que genera colas de gente que espera poder ser atendida al margen de las citas previas.