«El ochomilismo invernal es el arte del sufrimiento, como dijeron los polacos, pero también el de la paciencia». Alex Txikon esplicaba ayer con estas palabras desde Samagaon el estado actual de su expedición invernal al Manaslu junto con Simone Moro e Iñaki Álvarez. Tras ... la nieve caída, ahora toca esperar. Los partes anuncian tres días de buen tiempo y luego de nuevo malo, así que los alpinistas han decidido aguardar a que tanto la meteo como la nieve se estabilicen en Samagaon, último pueblo a los pies de la montaña, 1.500 metros por debajo del CB.
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«A día de hoy es imposible llegar a C2 debido a la inmensa cantidad de nieve caída. Nos quedan tres días de sol, lo que es insuficiente para que la nieve se asiente y se estabilice. De modo que nos queda entrenar la paciencia y retrasar todo hasta finales de enero o primeros de febrero, así lo vemos tanto Simone como Iñaki y yo», explicaba el alpinista vizcaíno a través de su equipo de comunicación.
Pero no todos piensan igual. Los integrantes de la otra expedición que está intentando el Manaslu, en la que quedan el polaco Oswaldo Pereira y los belgas Sofie Lenaerts y Stef Maginelle junto a media docena de sherpas subieron hace un par de días al campo base e incluso se han aventurado montaña arriba. Ayer llegaron a los 5.200 metros según su baliza satélite.
Estas 'prisas' no parecen haber sentado muy bien a Alex y Simone. El italiano ha criticado en sus redes sociales la impaciencia de Pereira, líder de la otra expedición. Explicaba que «por el reconocimiento que hizo el helicóptero y por las fotos tomadas, a Alex y a mí nos parece realmente demasiado peligroso por la increíble cantidad de nieve acumulada y los signos de fractura de las placas de nieve. En todo caso -añadía Simone-, la valoración del riesgo es personal y por tanto no me permito juzgar decisiones y comportamientos distintos a los míos, a los nuestros».
Por su parte, Txikon mostraba ayer «todo nuestro respeto y ánimo a quienes han decidido regresar a CB», aunque añadía que «nuestra experiencia y conocimiento de la montaña nos dicen que es tiempo de esperar».
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El de Lemoa recordaba que «para subir al C-I hay que hacerlo asumiendo que el riesgo de avalanchas es de 5/5. Ya lo hicimos hace unos días y a creemos que no nos merece la pena volver a intentarlo en estas condiciones. Es verdad que no hemos venido a Nepal para estar en Katmandú o Samagaon, pero es lo que toca ahora», concluía.
Quien no volverá al campo base es Eneko Garamendi, mano derecha de Alex en el CB, que ha regresado ya a casa.
Cabe recordar que Txikon y su equipo se vieron obligados el pasado día 8 de enero a última hora a salir del CB del Manaslu ante las intensas nevadas de las últimas jornadas. Parte del equipo bajó a Katmandú en helicóptero y otros a pie a Samagaun ante el riesgo de avalanchas (nivel 5 en la escala europea). A comienzos de esta semana, una gran avalancha se llevó por delante parte del propio CB. «Nuestra experiencia e intuición desgraciadamente no fallaron, menos mal que no estuvimos allí para verlo en persona» ha recordado Txikon.
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