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Entre espectaculares glaciares, lagunas y páramos de la Cordillera Blanca, esa joya de los Andes peruanos, los hermanos Pou diseccionan las paredes de su cara sur para encontrar nuevas aperturas de rutas. En su nuevo viaje tienen como lugar estratégico el pueblo ... de San Marcos, desde donde se adentran en valles muy interesante con la ayuda de los quechuas.
Buscan rutas una vez más a su estilo, huyendo de las grandes aglomeraciones después de aclimatarse durante los tres primeros días en la capital andina de Huaraz, a 3.300 metros de altitud. También compraron los víveres y pertrechos necesarios para la nueva aventura que han emprendido junto al murciano Manu Ponce, el cámara peruano Álex Estrada y el aventurero madrileño Javier Olave.
Durante la primera exploración, el mal tiempo no ha impedido que los escaladores alaveses descubriesen varias montañas con potencial después de su primera semana en los Andes. Ahora queda lo más difícil: cerrar la logística–contratar mulas y gente local que les ayude a subir el material necesario hasta el campo base- y aventurarse unos cuantos días en la alta montaña. El equipo se medirá con montañas técnicamente muy difíciles que rondan los 5.000 metros, una altura en la que la falta de oxígeno hace que al ser humano le cuesta mucho poder realizar los movimientos explosivos que requiere la escalada.
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