Un restaurante para comer de lujo en un cruce de caminos en Bizkaia

Para los más madrugadores, está abierto desde las seis y media de la mañana. Y para cuando llega el mediodía tienen en su menú diario cinco platos a elegir; desde ensaladas variadas hasta legumbres, pastas y arroces. Como segundo, siempre hay dos opciones de pescado de temporada y otros tres de carne, pollo y variados. Entre los postres, todos completamente caseros, están los flanes de café y huevo, arroz con leche, cuajadas, natillas y tartas, con la de queso brillando por encima del resto.

El menú de los fines de semana es aún más exquisito y permite a los comensales elegir entre ensalada de bacalao, langostinos cocidos, o arroz cremoso para continuar con pescados como merluza frita sobre salsa de chipirones o rellena de hongos y puerros. Para los amantes de la carne, tampoco falta entrecot o carrilleras de ternera al vino tinto. El vino, pan y postre van incluidos en el precio final.

También se puede elegir rodaballo, besugo, kokotxas y las almejas en salsa verde, al igual que siempre existe la posibilidad de sentarse a comer una buena chuleta (42 euros el kilo), solomillo a la plancha (22 euros/kg), al queso o con foie (26) y carrilleras de ternera en salsa (18). La carta presenta además bacalao al pilpil (21,50), merluza a la ondarresa, frita o en salsa verde por 18 euros y rape al horno por 24 euros.