Cocina en directo y sin secretos al sur de Vitoria

Envivo debe su nombre al concepto de su cocina. Se trata de un restaurante amplio, diáfano, con grandes ventanales de techo a suelo que permite entrar la luz exterior y que los comensales puedan admirar las vistas de la zona de Aretxabaleta. Ésta es una zona ubicada al sur de la ciudad de Vitoria-Gazteiz, a unos quince minutos del centro, y que se encuentra en plena expansión urbanística. El local tiene una decoración estilo mediterráneo con mucha madera y tonos claros, azules y verdes, muy luminoso y cómodo. Con rincones que exhiben macetas.

Envivo es un restaurante con cocina abierta para, como su nombre indica, poder ver en vivo lo que se cuece en los fogones. Esto crea un ambiente de agradable cercanía, lo que lo hace aún más acogedor. En la cocina manda César Blanco y en la sala Ángela Cárdenas, una pareja de origen venezolano instalada desde hace algo más de tres años en Vitoria-Gasteiz. Allí sirven platos con una cuidadosa presentación, con detalles florales, unas recetas de apariencia sencilla pero que esconden los secretos de su cocinero, que trabaja con producto fresco y de calidad.

Uno de los entrantes favoritos de su clientela es el pulpo, que cocina a la brasa. Tiene dos presentaciones: la pata entera, que emplata con mahonesa de limón y pimentón De la Vera; y la tosta El pulpo Paul, con carpaccio de pulpo, alioli y aceite de pimentón. Otro de sus hits es la pluma ibérica a la brasa, con patatas asadas y salsa de perejil; y el bacalao, que presenta asado con crema de tomate y sus fritos de calamar, o con refrito de ajos y guindilla verde, verduritas asadas y panadera.

Como entrantes o raciones para compartir también nos podemos encontrar con sus famosas patatas Envivo con salsa de la casa, beicon y queso gratinado; o las patatas cabreadas, con salsa picante y alioli. También hay croquetas caseras variadas; carpaccio de txuleta con crema de pistacho, aove y sal Maldon; tataki de txuleta marinada; tataki marinado en soja, aove, zumo de limón y especias; un original crujiente de setas con salsa de hongos y foie con virutas de ibérico; el foie micuit con crema de manzanas y crocanti de almendras; o los txipirones playeros, que van fritos y acompañados con salsa de naranja.

Sus hamburguesas y bocadillos han enamorado a más de uno. Entre las primeras podemos elegir la Smashme, con dos filetes de carne picada, cebolla caramelizada, panceta curada, queso ahumado, salsa de beicon y burrata. También está La Marti, con carne de lomo alto, cebolla dulce al Pedro Ximenez, champiñones al ajillo, queso cheddar y salsa de la casa. O la Smashisnai, con dos de carne, salsa Envivo, pepinillos, cheddar y mostaza french's. En cuanto a sus bocadillos, destaca el de carrillera ibérica, con mahonesa y lonchas de calabacín.

Y entre los pescados, los txipirones a la plancha con agridulce de naranja y Módena; la lubina en directo con crema de Idiazabal, aceite de albahaca y tomate rama; o el lomo de merluza asada con refrito de ajos y guindilla y su guarnición. No hay que perderse los postres. Entre estos, gana por goleada la tarta de queso al horno con Idiazabal, pero también hacen flan de coco, tiramisú, crema de limón con pistacho triturado o tarta tres leches.

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